Ante un pedido del juez federal Carlos Soto Dávila, la Justicia estudiaba anoche la posibilidad de dar intervención en la convulsionada Corrientes a la Gendarmería Nacional. La solicitud del magistrado se habría originado en la toma pacífica de la Legislatura provincial que protagonizó ayer un grupo de dirigentes del Partido Nuevo, que lidera el ex gobernador Raúl Romero Feris, con el objetivo de impedir que la oposición avanzara en el tratamiento de los juicios políticos al ministro de Salud provincial, Juan Pedro Shaerer, y el gobernador, Pedro Braillard Poccard. Pero la actual crisis social y política que azota a Corrientes se vio agravada además con la renuncia de la secretaria de Hacienda, Zunilda Míguez, que afrontaba un juicio político por mal desempeño de sus funciones y malversación de fondos. Por otra parte, la protesta social de la que participan docentes, empleados públicos y una parte de la Policía continuó ayer, en reclamo por el pago de haberes atrasados. El gobernador correntino -que no piensa renunciar, según aseguró- fue apedreado durante una nueva manifestación de estatales. Mientras tanto, en el Gobierno nacional buscan una negociación política, al tiempo que niegan una eventual intervención federal.
Ante un pedido del juez federal Carlos Soto Dávila, la Justicia estudiaba anoche la posibilidad de dar intervención en la convulsionada Corrientes a la Gendarmería Nacional. La solicitud del magistrado se habría originado en la toma pacífica de la Legislatura provincial que protagonizó ayer un grupo de dirigentes del Partido Nuevo, que lidera el ex gobernador Raúl Romero Feris, con el objetivo de impedir que la oposición avanzara en el tratamiento de los juicios políticos al ministro de Salud provincial, Juan Pedro Shaerer, y el gobernador, Pedro Braillard Poccard. Pero la actual crisis social y política que azota a Corrientes se vio agravada además con la renuncia de la secretaria de Hacienda, Zunilda Míguez, que afrontaba un juicio político por mal desempeño de sus funciones y malversación de fondos. Por otra parte, la protesta social de la que participan docentes, empleados públicos y una parte de la Policía continuó ayer, en reclamo por el pago de haberes atrasados. El gobernador correntino -que no piensa renunciar, según aseguró- fue apedreado durante una nueva manifestación de estatales. Mientras tanto, en el Gobierno nacional buscan una negociación política, al tiempo que niegan una eventual intervención federal.