En el año que finalizó en septiembre los ingresos crecieron 13%, a US$ 7.300 millones, dijo la compañía en un comunicado. Este resultado se debe en parte a un aumento de 29% (a más de US$ 1.000 millones) en su firma de Estados Unidos. Es la primera vez que la firma supera los US$1.000 millones en ingresos.
Pero todas las líneas de negocios de la firma contribuyeron a este crecimiento, en particular la práctica de consultoría y asesoramiento , que experimentó un aumento de 51,4%. Siempre en Estados Unidos, la práctica impositiva también creció — 29,9% mientras la de seguros sumó un sólido 17,5%. El negocio de consultoría y asesoramiento representa 16% de los ingresos totales de BDO USA. El aporte de impuestos y seguros es de 32% y 52% respectivamente.
Martin Van Roekel, CEO global de BDO dijo que estos resultados son “una combinación de crecimiento orgánico y fusiones/adquisiciones. Las fusiones ayudan a aumentar los ingresos pero a la vez fomentan el crecimiento orgánico porque nos permiten ofrecer a nuestros clientes una mayor cantidad de servicios”.
Los últimos años han sido testigos de un proceso de consolidación en la capa mediana de firmas de consultoría y contabilidad porque muchas empresas globales buscan trabajar con compañías internacionales de servicios profesionales.
Al igual que ocurre con sus competidores más grandes, el negocio de asesoramiento de BDO está creciendo a mayor velocidad que el de auditoría. Las áreas clave de crecimiento dentro del asesoramiento son la práctica de servicios forenses, que se ocupa de prevención de fraude y corrupción, y la de servicios de asesoramiento en riesgos, que se enfoca en controles internos de las compañías. Los ingresos en auditoría y contabilidad cayeron levemente a 59% mientras que la cuota impositiva del negocio se mantuvo más o menos sin cambios en 20,4%.