Amazon aspira a la entrega prácticamente instantánea. Y sus entregas implican el mundo entero. De manera que ahora piensa en grande. Los drones le quedan chicos. Sólo sirven para entregas de distancia relativamente corta.
Ya tiene el primero, un enorme avión de carga llamado “Amazon One” y está pintado con los colores característicos de la marca azul y oro. En la cola lleva el número N1997A, que hace referencia al año en que Jeff Bezos fundó la compañía de ecommerce.
Es evidente que Amazon quiere tener un mayor control sobre su cadena logística. La nueva flota, que ya es realidad, está compuesta por aviones de carga 767 extremadamente rápidos.
Amazon aplicó desde el primer momento su filosofía: controlar todos los puntos de la distribución y logística para sus clientes, cambiar permanentemente para mejorar entrega y costo. Primero construyó sus propios servidores, después abrió la plataforma a todo el mundo y figuró entre las primeras en innovar en la nube.
La gente que compra online, o que aspira a hacerlo, tiene tres principales problemas: poder ver o probar el producto antes de comprarlo, la entrega del producto en tiempo y forma y la seguridad del pago. Amazon parece haber controlado el último, pero lleva años dependiendo de las grandes empresas de distribución de paquetes internacionales y nacionales en todos los países donde opera (DHL, UPS, FedEx, MRW, etc.), Ese es el renglón que ahora quiere controlar también.
Una flota propia permitiría a Amazon disminuir los costos que implica mantener almacenado todo su inventario sin vender. Para el experto Ryan Petersen, de FlexPort que USP y FedEx tienen motivos para alarmarse. “No nos engañemos, Jeff Bezos [CEO de Amazon], usará un día esta nueva flota de aviones para lanzar un asalto frontal por el negocio de mercancías de estas empresas. Cuando lo haga, podemos estar seguros que [Amazon] se centrará en incansablemente convertirse en el proveedor de bajo costo con la mejor experiencia para el cliente. La misma y poderosa combinación que [Amazon] emplea en el resto del mercados en los que opera”.
En el mar también tiene planes. El mismo Petersen publica que ha obtenido verificación de autoridades estadounidenses que han concedido una licencia para transporte oceánico de mercancías a Amazon China.
Esto es realmente importante, y destaca la capacidad de Amazon para conseguir que el enorme tejido industrial productor Chino tenga otro acceso más a los hogares estadounidenses. Amazon China, de aplicar el mismo espíritu de cambios y ajustes para reducir costos y aumentar la productividad de sus transportes, podría revolucionar la forma en que se mueven los bienes a través el Pacífico, en una de las rutas comerciales marítimas más grandes del mundo.