Documentos internos de la compañía muestran que el número de usuarios norteamericanos menores de 30 años está declinando y que Instagram, que ha tenido un éxito fenomenal desde que fuera comprada por Facebook en 2012, parece estar llegando al límite de su crecimiento entre entre los usuarios más jóvenes de los principales mercados. Eso plantearía serios problemas para el futuro de la compañía.
Una de las soluciones que ha buscado la compañía para hacer frente a estos problemas de crecimiento – invitar a los usuarios a que abran múltiples cuentas – le está trayendo problemas técnicos, legales y de reputación.
Parece que Facebook no logra tener una cuenta precisa de cuántos usuarios reales tiene su servicio. Esto le genera problemas al negocio publicitario, de donde obtiene sus principales ganancias.
El tema se conoce gracias a que Frances Haugen, ex empleada de la compañía, entregó documentos a los reguladores y al Congreso. Un estudio interno de 2021 muestra que entre 40 y 60’% de las nuevas cuentas en Estados Unidos son hechas por usuarios que ya tienen una cuenta en Facebook.
Ante la escasa confiabilidad de las estadísticas de Facebook, muchos anunciantes presionan para que la compañía abra sus plataformas a la verificación de terceros.
