El negocio local de streaming crece con fuerza y en tres años se espera que movilice más de u$s100 millones en el país.
En la actualidad, las plataformas para bajar música crecen a un ritmo de 50% por año. Un estudio de la consultora PwC sobre el mercado en Argentina asegura que durante 2016 el negocio musical facturará en el país US$1,4 millón más que el año pasado, superando en total los US$ 88 millones de facturación anual. El mismo relevamiento apunta que el sector tendrá una tasa de crecimiento anual completa de 1,7% hasta percibir ingresos por US$ 94 millones en 2019. El origen de todo este crecimiento, siempre según PwC, señala los nuevos nichos primordiales de la industria: los shows en vivo y las ventas de música digital.
En 2015 el negocio musical global creció por primera vez en veinte años. La clave de ese crecimiento histórico, que puso fin a dos décadas de estancamiento, fueron los servicios de streaming. A nivel mundial, las decenas de plataformas como Spotify y Deezer crecieron un 45,2% con respecto al 2014 y reportaron ingresos por 2.900 millones de dólares.
Tal fue el despegue de los servicios online, que la ventas de discos digitales empiezan a superar por primera vez a las copias físicas. El año pasado las ventas digitales sumaron US$ 6.850 millones, US$ 30 millones más que los ingresos percibidos por las ventas de CD o vinilos.