Wall Street: otro derrumbe en las tecnológicas

Los nuevos resultados de la economía de EE.UU. mostraron síntomas de desaceleración, que significarían estabilidad para la política monetaria, pero perjudicarían a una serie de empresas, especialmente las de nuevas tecnologías.

28 noviembre, 2000

(EFE).- Las señales de una disminución en el ritmo de crecimiento de la economía, que implicaría menores ganancias para una serie de empresas, en particular en el sector de las nuevas tecnologías, hicieron que las bolsas de Nueva York cerraran hoy (martes 28) en baja.

El promedio industrial Dow Jones, que mide la variación de las acciones de 30 grandes empresas, bajó 38,49 puntos (0,38%), hasta los 10.507,58.

El mercado electrónico Nasdaq, en el que cotizan las grandes empresas de nuevas tecnologías, computación e Internet, perdió 145,51 puntos (5,05%), hasta los 2.734,98.

El S&P500, que tiene en cuenta 500 empresas de tamaño medio, bajó 12,88 puntos (0,95%), hasta los 1.336,09; y el New York Stock Exchange (Nyse), que incluye los valores tradicionales, perdió 2,6 puntos (0,41%), hasta los 634,33.

El volumen de negocios fue de cerca de 1.000 millones de acciones, y entre los títulos que cambiaron de manos 1111 subieron, 1718 bajaron y 498 se mantenían sin cambios.

Los bonos del Tesoro a 30 años subieron de precio y su rentabilidad, que se mueve en sentido inverso al valor, bajó a 5,68% frente a 5,7% con que había cerrado el lunes.

En los primeros minutos de negocios las bolsas tomaron una leve tendencia al alza, impulsadas por la esperanza sobre un posible cambio en la dirección de la política monetaria de la Reserva Federal.

En la mañana de hoy se dieron a conocer las cifras de la confianza de los estadounidenses en la marcha de la economía y que resultaron más bajas a las previstas.

Asimismo hoy se informó sobre el nivel de las órdenes para fabricar bienes duraderos, que también estuvieron por debajo de lo previsto y anotaron la primer contracción en tres meses.

A juicio de algunos expertos esto demuestra que la economía se está enfriando, lo que podría llevar a las autoridades monetarias a relajar su política.

El 19 de diciembre se reúne el Comité de Política Monetaria de la Reserva Federal y los analistas comienzan a confiar en que en esa oportunidad las autoridades cambien su inclinación desde “favorable a una alza de tasas” a “neutra”, lo cual podría despejar el temor de nuevas subas de tasas.

Si tal cosa ocurriera, los analistas creen que se podría producir una corriente de compras de fin de año que permita recuperar algo de las pérdidas que sumó el mercado en lo que va del año.

Sin embargo, el enfriamiento económico más que beneficios traerá serios problemas para una serie de empresas estadounidenses, especialmente en el sector de las nuevas tecnologías, que dependen de una fuerte demanda de los consumidores para seguir vendiendo sus productos.

Asimismo la incertidumbre electoral se mantiene, lo que a juicio de los analistas agrega inquietud en los mercados.

En la noche de ayer y a mediodía de hoy el candidato demócrata a la Casa Blanca, Al Gore, dijo que seguirá en la batalla electoral y que hará todo lo que esté a su alcance para asegurar que todos los votos emitidos en Florida sean contados.

Pese a que ningún analista esperaba que Gore desistiera de su batalla por la presidencia, durante algunos minutos, antes del discurso de hoy, las bolsas recuperaron terreno alentadas por la esperanza de algunos inversores de que Gore reconociera su derrota.

Cuando Gore reiteró las palabra de ayer, los inversores mostraron toda su desilusión y los mercados volvieron a caer con fuerza.

(EFE).- Las señales de una disminución en el ritmo de crecimiento de la economía, que implicaría menores ganancias para una serie de empresas, en particular en el sector de las nuevas tecnologías, hicieron que las bolsas de Nueva York cerraran hoy (martes 28) en baja.

El promedio industrial Dow Jones, que mide la variación de las acciones de 30 grandes empresas, bajó 38,49 puntos (0,38%), hasta los 10.507,58.

El mercado electrónico Nasdaq, en el que cotizan las grandes empresas de nuevas tecnologías, computación e Internet, perdió 145,51 puntos (5,05%), hasta los 2.734,98.

El S&P500, que tiene en cuenta 500 empresas de tamaño medio, bajó 12,88 puntos (0,95%), hasta los 1.336,09; y el New York Stock Exchange (Nyse), que incluye los valores tradicionales, perdió 2,6 puntos (0,41%), hasta los 634,33.

El volumen de negocios fue de cerca de 1.000 millones de acciones, y entre los títulos que cambiaron de manos 1111 subieron, 1718 bajaron y 498 se mantenían sin cambios.

Los bonos del Tesoro a 30 años subieron de precio y su rentabilidad, que se mueve en sentido inverso al valor, bajó a 5,68% frente a 5,7% con que había cerrado el lunes.

En los primeros minutos de negocios las bolsas tomaron una leve tendencia al alza, impulsadas por la esperanza sobre un posible cambio en la dirección de la política monetaria de la Reserva Federal.

En la mañana de hoy se dieron a conocer las cifras de la confianza de los estadounidenses en la marcha de la economía y que resultaron más bajas a las previstas.

Asimismo hoy se informó sobre el nivel de las órdenes para fabricar bienes duraderos, que también estuvieron por debajo de lo previsto y anotaron la primer contracción en tres meses.

A juicio de algunos expertos esto demuestra que la economía se está enfriando, lo que podría llevar a las autoridades monetarias a relajar su política.

El 19 de diciembre se reúne el Comité de Política Monetaria de la Reserva Federal y los analistas comienzan a confiar en que en esa oportunidad las autoridades cambien su inclinación desde “favorable a una alza de tasas” a “neutra”, lo cual podría despejar el temor de nuevas subas de tasas.

Si tal cosa ocurriera, los analistas creen que se podría producir una corriente de compras de fin de año que permita recuperar algo de las pérdidas que sumó el mercado en lo que va del año.

Sin embargo, el enfriamiento económico más que beneficios traerá serios problemas para una serie de empresas estadounidenses, especialmente en el sector de las nuevas tecnologías, que dependen de una fuerte demanda de los consumidores para seguir vendiendo sus productos.

Asimismo la incertidumbre electoral se mantiene, lo que a juicio de los analistas agrega inquietud en los mercados.

En la noche de ayer y a mediodía de hoy el candidato demócrata a la Casa Blanca, Al Gore, dijo que seguirá en la batalla electoral y que hará todo lo que esté a su alcance para asegurar que todos los votos emitidos en Florida sean contados.

Pese a que ningún analista esperaba que Gore desistiera de su batalla por la presidencia, durante algunos minutos, antes del discurso de hoy, las bolsas recuperaron terreno alentadas por la esperanza de algunos inversores de que Gore reconociera su derrota.

Cuando Gore reiteró las palabra de ayer, los inversores mostraron toda su desilusión y los mercados volvieron a caer con fuerza.

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