Banca offshore: ¿qué pasa en las islas caribeñas?

Treinta meses después de salir una lista negra, hoy célebre, su impacto en las plazas financieras extraterritoriales –offshore- de las Antillas es cualquier cosa menos claro. Salvo una, las mayores siguen prosperando.

16 mayo, 2003

La nómina fue publicada por la Organización para Cooperación
y Desarrollo Económico (OCDE, club de países ricos, París).
Funcionarios de la entidad admiten que el blanqueo de dinero continúa en
esas islas. Algunas, como San Vicente y Granadinas, ni siquiera muestran cambios.

El mayor lavafondos, Caimán, perdió bancos pero incorporó
compañías financieras dedicadas al métier. El archipiélago
domina el lavado latinoamericano y es el quinto offshore del planeta. ¿Cuáles
los otros cuatro?… Pues, Nueva York, Londres, Hongkong y Tokio. Tras la difusión
de la lista negra, desapareció apenas 7% de operadores dudosos y quedan
69.259 en el registro.

Bahamas vio esfumarse gran parte de sus bancas de papel pero, como sucede ahora
en Luxemburgo, el gobierno mismo hizo de escoba. Por el contrario, St Kitts-Nevis,
la pionera, casi ha desaparecido del elenco, tras aplicar las mismas medidas que
ahora pone en práctica Bahamas: normas estrictas en cuanto a divulgación
de cifras y cooperación con autoridades tributarias del exterior.

Hubo un éxodo pero, todavía, el registro oficial incluye 317 bancos.
Apenas 23,6% menos que un año antes de salir la lista negra, si bien fuentes
privadas sostienen que sólo unos 150 realmente operan.

Respecto de todo el negocio offshore caribeño, el abogado Vincent
Hubbard (se le atribuye la introducción del sistema, vía St Kitts-Nevis,
en 1980) estima que el volumen ha disminuido casi a la mitad, por culpa de la
OCDE, y tardará años en recobrarse (algo que Estados Unidos hará
lo imposible para evitar). Finalmente, hay una extraña omisión en
la famosa lista: las Antillas Meridionales. Allá, la banca holandesa opera
offshores desde mucho antes que Hubbard, pues ya gestionaba complejos y
fructíferos mecanismos de lavado…. en 1973.

La nómina fue publicada por la Organización para Cooperación
y Desarrollo Económico (OCDE, club de países ricos, París).
Funcionarios de la entidad admiten que el blanqueo de dinero continúa en
esas islas. Algunas, como San Vicente y Granadinas, ni siquiera muestran cambios.

El mayor lavafondos, Caimán, perdió bancos pero incorporó
compañías financieras dedicadas al métier. El archipiélago
domina el lavado latinoamericano y es el quinto offshore del planeta. ¿Cuáles
los otros cuatro?… Pues, Nueva York, Londres, Hongkong y Tokio. Tras la difusión
de la lista negra, desapareció apenas 7% de operadores dudosos y quedan
69.259 en el registro.

Bahamas vio esfumarse gran parte de sus bancas de papel pero, como sucede ahora
en Luxemburgo, el gobierno mismo hizo de escoba. Por el contrario, St Kitts-Nevis,
la pionera, casi ha desaparecido del elenco, tras aplicar las mismas medidas que
ahora pone en práctica Bahamas: normas estrictas en cuanto a divulgación
de cifras y cooperación con autoridades tributarias del exterior.

Hubo un éxodo pero, todavía, el registro oficial incluye 317 bancos.
Apenas 23,6% menos que un año antes de salir la lista negra, si bien fuentes
privadas sostienen que sólo unos 150 realmente operan.

Respecto de todo el negocio offshore caribeño, el abogado Vincent
Hubbard (se le atribuye la introducción del sistema, vía St Kitts-Nevis,
en 1980) estima que el volumen ha disminuido casi a la mitad, por culpa de la
OCDE, y tardará años en recobrarse (algo que Estados Unidos hará
lo imposible para evitar). Finalmente, hay una extraña omisión en
la famosa lista: las Antillas Meridionales. Allá, la banca holandesa opera
offshores desde mucho antes que Hubbard, pues ya gestionaba complejos y
fructíferos mecanismos de lavado…. en 1973.

Compartir:
Notas Relacionadas

Suscripción Digital

Suscríbase a Mercado y reciba todos los meses la mas completa información sobre Economía, Negocios, Tecnología, Managment y más.

Suscribirse Archivo Ver todos los planes

Newsletter


Reciba todas las novedades de la Revista Mercado en su email.

Reciba todas las novedades