¿Arabia saudita tendrá reservas suficientes en el futuro?
Desde que hace más de medio siglo descubriera sus ricas reservas, Arabia saudita ha bombeado el petróleo que necesitaba el mundo. Pero que la demanda crece, sus reservas declinan y muchos temen una crisis de abastecimiento energético.
Mientras los pronósticos energéticos calculan que Arabia saudita
tendría que duplicar su producción a partir de la próxima
década, especialistas y autoridades en el sector hablan de un probable
estancamiento de la capacidad nacional a niveles actuales. Si eso es así,
se abrirá una brecha entre la oferta y demanda energética global.
Un estudio saudita calcula que para el año 2011 la producción total
será de 10,15 millones de barriles diarios, aproximadamente la capacidad
actual. Pero para satisfacer la demanda mundial probable, el brazo de investigación
energética del Departamento de Estado de EEUU dice que Arabia saudita tendrá
que producir 13,6 millones de barriles por día para el año 2010
y 19,5 millones de barriles diarios para 2020.
Arabia saudita fue el principal exportador de petróleo durante 30 años.
No se está quedando sin petróleo, pero le está resultando
más difícil y más caro extraerlo. Hoy, el país produce
unos 8 millones de barriles diarios, aproximadamente la décima parte de
las necesidades del mundo. Es el principal proveedor de Estados Unidos, que a
su vez es el mayor consumidor de energía.
No sería la primera vez que fallan las predicciones sobre el comportamiento
del mercado petrolero, pero si la producción saudita no alcanza para
cubrir la demanda que cubre actualmente, las consecuencias, dicen los expertos,
podrían ser serias. Otros grandes productores, como Rusia e Irak no tienen
las inmensas reservas de Saudi Aramco ni excedentes para exportar, ni nuevos
yacimientos prometedores como para compensar la diferencia. Como resultado,
los precios podrían subir. Saudi Aramco dice que su dominio en los mercados
petroleros mundiales crecerá porque, “si hace falta puede ampliar
su capacidad a 12 millones de barriles diarios o más haciendo las necesarias
inversiones”.
Los expertos mundiales en el tema toman con pinzas esta declaración.
Mientras los pronósticos energéticos calculan que Arabia saudita
tendría que duplicar su producción a partir de la próxima
década, especialistas y autoridades en el sector hablan de un probable
estancamiento de la capacidad nacional a niveles actuales. Si eso es así,
se abrirá una brecha entre la oferta y demanda energética global.
Un estudio saudita calcula que para el año 2011 la producción total
será de 10,15 millones de barriles diarios, aproximadamente la capacidad
actual. Pero para satisfacer la demanda mundial probable, el brazo de investigación
energética del Departamento de Estado de EEUU dice que Arabia saudita tendrá
que producir 13,6 millones de barriles por día para el año 2010
y 19,5 millones de barriles diarios para 2020.
Arabia saudita fue el principal exportador de petróleo durante 30 años.
No se está quedando sin petróleo, pero le está resultando
más difícil y más caro extraerlo. Hoy, el país produce
unos 8 millones de barriles diarios, aproximadamente la décima parte de
las necesidades del mundo. Es el principal proveedor de Estados Unidos, que a
su vez es el mayor consumidor de energía.
No sería la primera vez que fallan las predicciones sobre el comportamiento
del mercado petrolero, pero si la producción saudita no alcanza para
cubrir la demanda que cubre actualmente, las consecuencias, dicen los expertos,
podrían ser serias. Otros grandes productores, como Rusia e Irak no tienen
las inmensas reservas de Saudi Aramco ni excedentes para exportar, ni nuevos
yacimientos prometedores como para compensar la diferencia. Como resultado,
los precios podrían subir. Saudi Aramco dice que su dominio en los mercados
petroleros mundiales crecerá porque, “si hace falta puede ampliar
su capacidad a 12 millones de barriles diarios o más haciendo las necesarias
inversiones”.
Los expertos mundiales en el tema toman con pinzas esta declaración.
