Una clase media grande, próspera y estable es importante por la sociedad civil. Muchos estudiosos de este problema afirman que esa clase media sostiene la inclusión, la tolerancia, la democracia y muchas otras cosas buenas; que es un gran motor de la demanda para una economía porque aporta muchas familias con el dinero suficiente para comprar muchas cosas.
¿Pero qué pasa cuando los empleos tradicionales de la era industrial comienzan a desaparecer? Voltaire ya lo había dicho” el trabajo nos salva de tres males: aburrimiento, vicio y necesidad”.
Ahora, ¿Qué pasa cuando el trabajo desaparece? Hay un trabajo del cientista político Charles Murray que documenta cómo han cambiado las condiciones sociales en los últimos 50 años para la clase media baja norteamericana mientras para la clase media alta se han mantenido más estables.
El divorció creció hasta las nubes, también el crimen, el número de hombres que abandonan su hogar y cayó el número de hijos criados por hogares con dos progenitores.
Estos males sociales, dice Murray vienen aparejados con la desaparición de los empleos de la era industrial. Hay un acalorado debate sobre si son causados por la desaparición del trabajo estable o si se deben a otros factores. La verdad, es que es muy difícil atribuirlos a una sola cosa. Pero Murray cree que sí es una causa.
Un paper publicado este año por los ganadores del Premio Nobel Angus Deaton y Anne Case revela una tendencia mucho más alarmante que la degradación social: si bien la tasa de mortalidad de todos los estadounidenses cayó notablemente en las últimas décadas, no ocurrió lo mismo con la de los ciudadanos de mediana edad con pocos años de estudio: al contrario, aumentó. Ellos dicen que entre 1999 y 2013 la tasa de mortalidad de este grupo creció 134 por mil. Es un salto grande Según dice Deaton; “sólo el SIDA logró eso en los últimos años”.
¿Qué es lo que está provocando este trágico aumento? Deaton y Case dicen que gran parte de este aumento puede atribuirse a tres factores: suicidio, hepatitis crónica y cirrosis, envenenamiento por alcohol y drogas. Dicho de otra forma; la gente en este grupo socioeconómico se está matando consciente o inconscientemente.
Hará falta mucha más investigación por qué están ocurriendo estas cosas, pero seguramente no son casuales. Deacon y Case señalan, por ejemplo, que los hispanos y los negros no muestran un aumento grande en mortalidad. Esto podría ser, dicen, porque están más acostumbrados a no tener un trabajo estable como los blancos y a que ahora, además, ya no están entre los que tienen menos años de educación.
De todos modos, hay mucho por estudiar en este terreno.