El banco central de Estados Unidos está revisando los requisitos de capital y liquidez que impone a los bancos, especialmente los que se ubican entre US$ 100.000 millones y US$ 250.000 millones en activos. También evalúa, además de una cantidad de otras cosas, las pruebas de estrés que realiza anualmente, que evalúan la capacidad de los prestamistas para resistir ante escenarios adversos económicos y financieros.
La revisión es parte de una amplia evaluación anunciada por la Fed el martes de cómo supervisó y reguló al Silicon Valley Bank, que colapsó la semana pasada y disparó la alarma por un un contagio más amplio. El banco central es uno de los reguladores que hoy se preguntan si pasaron por alto señales de problemas que estaban creciendo en el SVB. Algunos expertos dicen que los problemas eran evidentes.
Para contener las consecuencias, la Fed junto con el Departamento de la Tesorería y la Federal Deposit Insurance Corporation, dieron a conocer medidas de emergencia luego del acalorado fin de semana que garantizó todos los depósitos en el SVB y en el prestamista Signature Bank, que las autoridades asumieron el domingo. La Fed también anunció una facilidad de préstamo para los bancos para asegurar que los prestamistas puedan cumplir con todas las necesidades de los depositantes.
Pero algunos expertos en regulación dicen que las banderas rojas en el SVB podrían haber sido identificadas con anterioridad, o evitadas, si los legisladores y reguladores no hubieran aflojado recientemente los requisitos para pequeños prestamistas.
