La decisión de Big Blue era otro golpe al abuso de opciones como instrumentos remuneratorios. Desde enero, pues, ese grupo percibe su salario anual (US$ 200.000 cada uno, una bicoca) en acciones sin voto o parcialmente en efectivo.
En esa empresa y tantas otras, directores y jerárquicos han aprovechado durante largo tiempo de la mezcla efectivo-acciones-opciones. El tercer componente permite pagar menos impuestos a las compañías y los beneficiados.
Ello responde a una filosofía ofertista tenazmente sostenida por George W.Bush: los ricos deben tributar lo menos posible, así destinan sus ganancias a estimular la economía. No en vano, su actual secretario de hacienda, Henry Paulson, es un magnate que lideraba Goldman Sachs.
Pero años de sospechas y escándalos han minado esas prácticas. Hace algún tiempo, a la sazón, se descubrió el cambio ilegal de fechas, por el cual firmas de Silicon valley las corría para hacer las opciones más lucrativas al momento de revenderse o convertirse. Vale decir, se antedataban o posdataban para aumentar la diferencia entre el precio original y el del momento de ejercerlas. El escándalo fue velozmente tapado, pero más tarde empezó a surtir efecto.
En realidad, el pago con opciones viene perdiendo terreno desde principio de siglo, cuando fue detonado por el desinfle de la burbuja puntocom, sus acciones y opciones. En 2001, 80% de los directorios las percibía, cifra que bajó en 2005 a 53%. Algunos expertos estiman que, hacia 2010, no pasará de 10% en Estados Unidos.
La decisión de Big Blue era otro golpe al abuso de opciones como instrumentos remuneratorios. Desde enero, pues, ese grupo percibe su salario anual (US$ 200.000 cada uno, una bicoca) en acciones sin voto o parcialmente en efectivo.
En esa empresa y tantas otras, directores y jerárquicos han aprovechado durante largo tiempo de la mezcla efectivo-acciones-opciones. El tercer componente permite pagar menos impuestos a las compañías y los beneficiados.
Ello responde a una filosofía ofertista tenazmente sostenida por George W.Bush: los ricos deben tributar lo menos posible, así destinan sus ganancias a estimular la economía. No en vano, su actual secretario de hacienda, Henry Paulson, es un magnate que lideraba Goldman Sachs.
Pero años de sospechas y escándalos han minado esas prácticas. Hace algún tiempo, a la sazón, se descubrió el cambio ilegal de fechas, por el cual firmas de Silicon valley las corría para hacer las opciones más lucrativas al momento de revenderse o convertirse. Vale decir, se antedataban o posdataban para aumentar la diferencia entre el precio original y el del momento de ejercerlas. El escándalo fue velozmente tapado, pero más tarde empezó a surtir efecto.
En realidad, el pago con opciones viene perdiendo terreno desde principio de siglo, cuando fue detonado por el desinfle de la burbuja puntocom, sus acciones y opciones. En 2001, 80% de los directorios las percibía, cifra que bajó en 2005 a 53%. Algunos expertos estiman que, hacia 2010, no pasará de 10% en Estados Unidos.