El 2020 fue un año que se caracterizó por la explosión de las compras online, lo que convirtió al comercio electrónico en la “vedette” del momento, En pleno apogeo del confinamiento, producto de la pandemia, las compras online fueron la única opción para los consumidores para acceder a lo que necesitaban sin salir de su casa. Junto con este crecimiento de las tiendas electrónicas cobraron mayor relevancia los “e-commerce” y los “marketplaces”.
E-commerce es la acción de comprar y vender en línea, es decir, a través de Internet. El e-commerce o comercio electrónico es un único comercio, ya que se trata de una plataforma donde un vendedor, también conocido como seller, ofrece una cantidad de productos o servicios a través de la venta digital.
Ariel Di Stéfano, profesor de Marketing Digital y Ventas por Internet de la Universidad Nacional de San Martín y co fundador de la agencia de marketing digital G2Rocket concuerda con esta definición y agrega: “La venta digital de un e-commerce incluye la catalogación, es decir, la muestra de los productos, su selección en un carrito de compras y eventualmente la ejecución de un pago a través de una pasarela, bajo la promesa de envío de esos productos”.
Mientras que un marketplace es un mercado en línea, o sea, un tipo de sitio web de comercio electrónico multicanal donde muchos oferentes y múltiples demandantes se encuentran en la búsqueda de cubrir sus necesidades. “La ventaja de una tienda electrónica con respecto a un e-commerce es la variedad de productos y servicios que pueden ofrecerse, ya que hay un amplio abanico de proveedores. Del otro lado, podés tener una base de clientes consolidada, como es el caso de las tiendas bancarias, que te aseguran una demanda inicial. Por eso es un modelo win win, que funciona para todos los eslabones que componen esta cadena virtuosa”, destaca Daniel Jejcic, CEO de avenida+, una solución tecnológica integral a medida para la creación de marketplaces.
Mayra Fiszman, CFO de avenida+ también destaca como beneficio que: “las tiendas son los lugares indicados donde la mayoría de las personas buscan adquirir tanto lo que es compra diaria como también aquellos elementos ya no tan recurrentes, por la variedad de oferta que tienen a la hora de resolver la problemática del usuario y del consumidor general. Uno encuentra en el marketplace mayor variedad que si fuese a un único vendedor de vestimenta, calzado, blanquería o bazar. También al haber múltiples proveedores, hay una mayor flexibilidad en ofertas y promociones, así como también en métodos de pago”.
Para mayor claridad adjuntamos un cuadro comparativo con las diferencias de cada uno:
| Marketplace | e-Commerce |
| Shopping digital | Comercio digital |
| Muchos vendedores | Un vendedor |
| Stock de los diferentes proveedores | Inventario de productos |
| Logística desde su propio depósito o del proveedor | Logística desde su propio depósito |
| Sitio web gestionado por el shopping digital | Sitio web responsabilidad del comercio |
| Marketing pensado en la generación de oferta (vendedores) y demanda (compradores) | Marketing pensado en generación de demanda para los productos del único vendedor |
| Plataformas propietarias mayormente con foco en mejorar la experiencia general del cliente (logística, medios de pago, atención al cliente, etc.) | Plataformas enlatadas como soluciones para comenzar a operar con poca complicación |
Por otro lado, en el caso del marketplace existen dos tipos diferentes:
– Propios: es el caso de aquellas empresas que ya tienen una base de clientes como bancos, retails, farmacias, etc, y que tienen la capacidad de generar sus propios marketplaces. Unen oferta que proviene de múltiples proveedores, lo que les permite tener una variedad amplia de catálogo, así como también ofertas, promociones y métodos de pago. avenida+ tiene como principal expertise este tipo de desarrollos. Sólo para citar algunos de ellos, Tienda Ciudad, de Banco Ciudad, multiplicó por diez su operación a raíz de la pandemia, mientras que San Justo Shopping es el primer shopping online de Argentina.
– Generales: como son, en Argentina, Mercado Libre o Linio, dos exponentes con soluciones de listing, es decir, donde los productos se muestran y se ofrecen y se puede buscar y navegar a través de distintas categorías. Asimismo, brindan recursos para pagar a través de las pasarelas de pago como Mercado Pago, para enviar los productos con, por ejemplo, Mercado Envíos y soluciones financieras adicionales como son las cuotas y otros formatos de pagos. También cuentan con logística propia, logrando que el usuario tenga el producto seleccionado en el día o en un máximo de 48 horas.
Estas son las razones por las que Di Stéfano considera que el 2020 es el año de las tiendas online, ya que no sólo ayudaron a subsistir a diferentes industrias como la banca, los supermercados y especialmente los shoppings -que fueron los más afectados por tener que permanecer tantos meses cerrados- sino que también las reconvirtieron.
