<p>La forma más sencilla de venganza por parte de una persona despedida es revelar información sensible de la compañía. Bases de datos, carteras de clientes, condiciones comerciales, acciones y estrategias de marketing, y mucho más. Según una encuesta divulgada por la firma Iron Mountain yrealizada entre 2.000 trabajadores, muchos lo han hecho por un sentimiento de posesión de esa información o por el deseo de venganza.</p>
<p>Es cada vez más preocupante la acción de los ex empleados y las medidas que toman una vez están fuera del equipo. Algunos podrían llamarlo traición, otros comprenden que es parte de la competencia y el mercado que deliberadamente emula las tácticas que hacen a un grupo exitoso.</p>
<p>La prioridad ante una vacante siempre es para quien tiene la mayor experiencia ym deontro de esa experiencia entra ahora la información que ya maneja.</p>
<p>Es común observar ofertas de empleo en las que incluso se requiere personal con dominio de su propia cartera de clientes, bases de datos que suelen ser tomadas de su anterior empresa.</p>
<p>Según la encuesta éste es el principal problema de las compañías cuyas tácticas de marketing son su principal secreto para el éxito y la productividad. Los empleados de confianza y todo aquel que maneje información confidencial terminan apropiándose de ella categóricamente.</p>
<p>Pero no siempre han mala intención. Muchos de los encuestados dicen que lo hacen porque se sienten propietarios de la información o porque creen que les será útil en su próximo empleo.</p>
<p>Según estos datos, muchos de los que revelan información confidencial de las empresas lo hacen desde la improvisación y sin calcular el daño que hacen a sus antiguos contratantes.</p>
<p>Los resultados de la encuesta, en la que fueron interrogados 2.000 trabajadores de oficinas en Francia, Alemania, España y el Reino Unido, revelan que el principal blanco de los ex empleados son las bases de datos de clientes. 51% de los trabajadores en Europa toman la información simplemente para estar mejor plantados para su próximo trabajo, sobre todo las bases de datos confidenciales de clientes.</p>
<p>Otro material vulnerado es el de conferencias y campañas presentadas en mesas de trabajo: 46% de los trabajadores dijeron haber retirado ese tipo de material.</p>
<p>Por otro lado, 21% de los empleados toman las propuestas de la empresa, 18% hacen lo propio con los planes estratégicos, y 18% se hace con las rutas de trabajo o de servicio, y de todo cuanto representa información altamente sensible, valiosa y de importancia fundamental para la reputación de una empresa.</p>
<p>Los datos obtenidos en la encuesta revelan que dos tercios de los trabajadores aseguraron haber tomado la información porque habían participado en la creación de determinada estrategia, y tres cuartas partes afirmaron que creían que la información sería de gran ayuda en su próximo empleo.</p>
<p>Pero, cuando los empleados son despedidos la historia cambia. En este contexto, puede entrar en acción el deseo de venganza, y la información llevarse aunque no exista deseo de utilizarla.</p>
<p>En este sentido, el estudio reveló que un tercio de los trabajadores elimina o borra deliberadamente la información de las computadoras o la comparte con la competencia.</p>
<p>Los expertos sugieren que la falta de políticas adecuadas de gestión de información o de su aplicación efectiva podría ser un poderoso factor en la pérdida de información.</p>
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Riesgos de los despidos
Despedir nunca es una tarea agradable. Es terminar una relación con alguien con quien se ha trabajado un tiempo. Pero la forma y los motivos del despido pueden generar resentimiento y deseos de venganza.