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Las acciones que hacen fructífera una reunión requieren ser administradas antes, durante y después de cada encuentro. <br />
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Qué hacer antes.Lo que se haga antes de la reunión forma la base, porque sin un plan los resultados serán desalentadores. <br />
Identifique primero si necesita que algún otro empleado le ayude a planificar. Luego decida lo que quiere lograr con esa reunión. Fije metas posibles para el encuentro. Esas metas formarán el esqueleto de un buen plan. <br />
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Asegúrese de que realmente necesita la reunión. Una vez que haya desarrollado su plan, asegúrese de que la reunión es el vehículo apropiado para lograr el conjunto de metas. ¿Por qué? Por una reunión sale cara si uno piensa en el tiempo que pierden todas las personas que asisten. Por eso, haga el esfuerzo de ver con claridad si una reunión es el mejor vehículo para solucionar el problema entre manos.<br />
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Asegure que va a tener la asistencia de los convocados<br />
Para lograr las metas deben asistir todos los participantes. Si alguno de ellos manda un reemplazante, esa persona debe tener la autoridad para tomar decisiones de su representado<br />
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Distribuya hojas con el trabajo previo hecho por usted y el plan de la reunión. Si el plan se distribuye al principio de la reunión, los primeros minutos se pierden leyendo. Esa lectura hay que hacerla previamente para que los participantes hayan tenido tiempo de pensar en el plan y estén en mejores condiciones de hacer un aporte producvtivo.</p>
Reuniones más productivas
Una reunión requiere planificación.Como la gente suele pasar demasiado tiempo en reuniones, sería bueno que ese tiempo diera resultados positivos. Para lograrlo, el primer paso es planificarlas con cuidado.