Si bien muchos trabajadores van a durar en su empleo tanto como siempre, hará falta mayor nivel de experiencia o de habilidades para lograrlo.
Habrá más gente con carreras múltiples a lo largo de su vida. Y la disminución de la seguridad laboral exigirá a los trabajadores que presten mayor atención a la flexibilidad.
Los trabajadores con carreras tradicionales serán una porción menor del empleo administrativo.
Habrá un grupo mayor de empleados suplementarios, como temporarios y contratados, que aparecerá y desaparecerá con cambiantes niveles de trabajo, reentrenados según la necesidad.
Las empresas contratarán trabajo afuera cada vez más, especialmente para proyectos de corto plazo, de un año o menos.
El panorama laboral será diferente según la empresa y el campo de acción, porque cada negocio ajusta su personal según sus propias necesidades.
Por eso será más importante que nunca para los que busquen trabajo, especialmente los recién recibidos, entender la situación del campo que han elegido y anticiparse a los acontecimientos. El desafío será saber ajustar el propio proyecto de vida a las realidades del mercado.
Por un lado, habrá menos seguridad laboral. Por el otro, habrá más oportunidades para obtener diferentes tipos de experiencia, ajustar las propias habilidades y mostrar lo que cada uno vale.
Será fundamental estar constantemente dispuesto a aprender. El aprendizaje de por vida es una realidad: los trabajadores se reentrenarán cada vez más y aprenderán nuevas habilidades para mantenerse competitivos en el mercado laboral.
La empresa se concentrará más en el entrenamiento del personal, sea internamente o reclutando su personal en empresas que los preparan. Cualquiera sea el área, será fundamental tener habilidad en computación.
Aun si un empleo bien remunerado no utiliza computadoras (lo cual es cada vez menos probable), un trabajador puede usar un programa de entrenamiento computarizado o demostrar competencia.
Los expertos sugieren combinar habilidades toda vez que sea posible, especialmente las de vender con las de algún campo técnico.
Conocer a las personas adecuadas es una ayuda, pero las redes se deben tejer informalmente y durante mucho tiempo. Si alguien hace demasiados contactos mientras está buscando trabajo no engaña a nadie y espanta a la gente.
Un hombre de 40 años trabajó en cuatro compañías en 18 años, lo que da como promedio un jefe nuevo cada 14 meses. Armó una red de asesores personales, reclutadores de personal, ex compañeros y profesionales de otras carreras y negocios.
Esta es la tendencia del futuro. Los mentores siguen siendo importantes, pero ahora que hay tantas empresas que compran otras empresas y renuevan el personal, esas relaciones no van tan lejos como antes.
Una buena manera de lograr que los jóvenes adquieran experiencia y hagan contactos es a través de las prácticas internas. Habrá más pasantías a disposición en una variedad de áreas.
Finalmente, los que buscan empleo podrán aprovechar otro campo en expansión: el asesoramiento laboral. Una variedad de gente con todos los niveles de experiencia, incluyendo profesionales despedidos, ahora buscan asesores laborales para explorar sus habilidades e intereses.
El planeamiento de la carrera laboral ya no significa un camino recto. Significa desarrollar habilidades en un campo prometedor, saber venderse, y aprovechar al máximo las oportunidades que se presenten.
Si bien muchos trabajadores van a durar en su empleo tanto como siempre, hará falta mayor nivel de experiencia o de habilidades para lograrlo.
Habrá más gente con carreras múltiples a lo largo de su vida. Y la disminución de la seguridad laboral exigirá a los trabajadores que presten mayor atención a la flexibilidad.
Los trabajadores con carreras tradicionales serán una porción menor del empleo administrativo.
Habrá un grupo mayor de empleados suplementarios, como temporarios y contratados, que aparecerá y desaparecerá con cambiantes niveles de trabajo, reentrenados según la necesidad.
Las empresas contratarán trabajo afuera cada vez más, especialmente para proyectos de corto plazo, de un año o menos.
El panorama laboral será diferente según la empresa y el campo de acción, porque cada negocio ajusta su personal según sus propias necesidades.
Por eso será más importante que nunca para los que busquen trabajo, especialmente los recién recibidos, entender la situación del campo que han elegido y anticiparse a los acontecimientos. El desafío será saber ajustar el propio proyecto de vida a las realidades del mercado.
Por un lado, habrá menos seguridad laboral. Por el otro, habrá más oportunidades para obtener diferentes tipos de experiencia, ajustar las propias habilidades y mostrar lo que cada uno vale.
Será fundamental estar constantemente dispuesto a aprender. El aprendizaje de por vida es una realidad: los trabajadores se reentrenarán cada vez más y aprenderán nuevas habilidades para mantenerse competitivos en el mercado laboral.
La empresa se concentrará más en el entrenamiento del personal, sea internamente o reclutando su personal en empresas que los preparan. Cualquiera sea el área, será fundamental tener habilidad en computación.
Aun si un empleo bien remunerado no utiliza computadoras (lo cual es cada vez menos probable), un trabajador puede usar un programa de entrenamiento computarizado o demostrar competencia.
Los expertos sugieren combinar habilidades toda vez que sea posible, especialmente las de vender con las de algún campo técnico.
Conocer a las personas adecuadas es una ayuda, pero las redes se deben tejer informalmente y durante mucho tiempo. Si alguien hace demasiados contactos mientras está buscando trabajo no engaña a nadie y espanta a la gente.
Un hombre de 40 años trabajó en cuatro compañías en 18 años, lo que da como promedio un jefe nuevo cada 14 meses. Armó una red de asesores personales, reclutadores de personal, ex compañeros y profesionales de otras carreras y negocios.
Esta es la tendencia del futuro. Los mentores siguen siendo importantes, pero ahora que hay tantas empresas que compran otras empresas y renuevan el personal, esas relaciones no van tan lejos como antes.
Una buena manera de lograr que los jóvenes adquieran experiencia y hagan contactos es a través de las prácticas internas. Habrá más pasantías a disposición en una variedad de áreas.
Finalmente, los que buscan empleo podrán aprovechar otro campo en expansión: el asesoramiento laboral. Una variedad de gente con todos los niveles de experiencia, incluyendo profesionales despedidos, ahora buscan asesores laborales para explorar sus habilidades e intereses.
El planeamiento de la carrera laboral ya no significa un camino recto. Significa desarrollar habilidades en un campo prometedor, saber venderse, y aprovechar al máximo las oportunidades que se presenten.