Con las nuevas tecnologías lo líderes encuentran una manera ágil de evaluar la salud de la compañía para decidir embarcarse en mejoras.
El CEO, con la herramienta tecnológica adecuada, puede visualizar rápidamente, por ejemplo, el panorama competitivo de la empresa y decidir que es tiempo de implementar nuevas estrategias o analizar algunos factores internos que están impidiendo el crecimiento.
Las empresas actuales necesitan procesos actuales que aprovechen las posibilidades de las nuevas tecnologías. Aunque los preceptos básicos del método tradicional sean sólidos, estas tecnologías brindan a los líderes una forma menos complicada y más ágil de tener una visión totalizadora del actual estado de salud de sus compañías.
El fundamento del método digital para la efectividad organizacional toma la idea de una práctica existente conocida como el mellizo digital. En manufactura el concepto de un mellizo digital se asocia por lo general a un activo físico que es caro y lleva mucho tiempo desarrollar, construir, probar y que no obstante está sometido a las mismas reglas de obsolescencia que objetos menos complejos.
Al usar un mellizo digital, o sea un modelo virtual de ese activo, los diseñadores y fabricantes pueden utilizar diferentes insumos, mediciones y analizar la respuesta sin el tiempo ni el gasto ni el riesgo de crear un activo físico y probarlo. Usar un mellizo digital acorta el desarrollo de un producto, reduce capital y costos operativos.
Hoy la tecnología nos permite trasladar a otros campo los principios del mellizo digital de la manufactura. Cualquier empresa puede usar el concepto para experimentar en tiempo real sin preocuparse por consecuencias irrevocables en el mundo real. Y las empresas pueden adquirir conocimientos con más rapidez con una mejor imagen de cómo impactan cada una de las unidades de negocios en el total de la compañía. En esencia, este método permite experimentación imposible usando los procedimientos tradicionales.
