Ayer se conoció la noticia de que HP se hará cargo de US$ 8.800 millones del fraude contable de la empresa de software Autonomy que compró hace solo un año por US$ 10.000 millones . Se suponía, en su momento, que abriría las puertas del futuro a una compañía sólida y tradicional como HP: Big Data es el futuro de las redes porque los usuarios de tabletas y teléfonos inteligentes querrán acceder al contenido directamente desde la nube.
Compañías como éstas son realmente una amenaza para los gigantes tradicionales como HP. Oracle, Microsoft y Cisco también enfrentan presiones similares. Todos quieren comprar una porción del futuro y tienen el dinero para salirse con la suya.
Inclusive compañías menos tradicionales están invirtiendo fuertemente para no quedarse atrás. Google pagó US$ 12.500 millones por Motorola Mobility para asegurarse un lugar privilegiado en el segmento de teléfonos inteligentes. Facebook compró Instagram por US$ 750 millones para no perder la oportunidad de echar sus tentáculos sobre la nueva niña bonita de las redes sociales.
Sin embargo, identificar tendencias es complicado. Negocios como la compra de Autonomy tienen una alta probabilidad de fracasar.
A veces se gana y a veces se pierde. EMC, que fabrica equipos de almacenamiento de datos, pagó en 2003 US$ 625 millones por VMware, una empresa especializada en Cloud.
HP, por lo pronto, no se da por vencido. “Estamos decididos a hacer crecer a Autonomy. Sabemos que sus productos son vanguardistas y ayudarán a miles de clientes con soluciones innovadorasâ€, dijeron a través de un comunicado.