<p>La publicidad por video online debería llevarnos hacia una nueva era en el negocio. Pero no lo está haciendo, porque el negocio publicitario está enfocado, en su gran mayoría, en las cosas equivocadas. <br />
Hay básicamente dos áreas de discusión que dominan la conversación en lo que respecta al video online y ambas están atadas al mundo de “las cosas que siempre hicimos”. La primera es pre-roll, o sea una creatividad en formato vídeo que se muestra justo al comienzo de ver una noticia. Es lo más parecido a un anuncio de televisión pero en Internet. El usuario quiere acceder a un contenido y éste no es mostrado hasta que pase un determinado tiempo o puede saltarse el anuncio e ir directamente a ver el vídeo o seguir esperando.</p>
<p>Nos concentramos en esto porque es lo que las grandes agencias hacen y porque es donde está el dinero. <br />
La segunda es la creación de contenido con marca. Otra página saca de los libros de historia. Lo hicimos con las telenovelas. Nos dedicamos a esto porque la gente que trabaja en publicidad desea secretamente trabajar en Hollywood. <br />
Ambas son buenas oportunidades, pero limitarse a ellas es de miopes. La publicidad supo tratarse de cosas como persuasión, inspiraciòn, deseo. Hoy, la palabra impresión tiene un significado totalmente nuevo y la publicidad consiste en hojas de cálculo y ROI cuantificable. <br />
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Puede ser ambas cosas. Debería ser ambas cosas. Y el video online puede cerrar esa brecha. Los anunciantes deberían considerar con mucho cuidado cada oportunidad que les presenta el video digital. Aquí hay algunas: <br />
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<strong>Contenido descubrible</strong><br />
Google es un negocio multimillonario porque tropezó con algo poderoso en su intento. Cuando la gente quiere algo, lo busca. <br />
Cada vez más, el video se está convirtiendo en una parte más importante de esa búsqueda. Las marcas que tienen algo que mostrar, como por ejemplo, cómo se hace un buen pescado a la parrilla, deberían asegurarse de que cuando uno va a YouTube el suyo sea el primero de los videos que aparecen. . Si no, pierden una buena oportunidad. <br />
<strong>Medios propios</strong><br />
Es com´`un que las marcas consideren a un video creado para su propio sitio web como Cenicienta, la hijastra de la producción. Piensan que los va a ver menos gente, por lo tanto deben gastart enos en su prodcción. Eso es absurdo. Es probable que el público que lo vea sea más reducido pero no menos importante. Esa es la gente que levanta la meno, cliqueando su mouse y diciendo: sí quiero una relación más profunda con su marca. No se trata de convertirse en un canal de televisión pero sí de aprovechar la oportunidad de contar una historia más profunda a la audiencia adecuada. <br />
Integración de la experiencia.<br />
Una de las oportunidades más interesantes que se abren hoy a las marcas es crear valor para los consumidores a través de experiencias digitales. El video puede integrarswe a aquellas experiencias para hacerlas más poderosas, más imponentes a la vista y más invitante para sus clientes. <br />
Se puede, por ejemplo, crear una campaña como la de Adobe que se llamó “¿Real o falso? En la que los jugadores debían decir si una serie de imágenes eran reales o imitadas con herramientas Adobe. Los efectos creaban la imagen de una bailarina bailando arriba de un tranvía de la Roosevelt Island. Después de decir si era verdadera o falsa (era falsa) 50% de la gente investigó en la web cómo podían hacer eso elslos mismos</p>
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Los anunciantes siguen sin pegarla con el video online
Podrían hacer cosas muy interesantes pero siguen con formatos que parecen avisos publicitarios para televisión.