Son los miembros de la Generación Z –los nacidos entre 1995 y 2009–, la más numerosa e influyente que cualquier otra generación anterior. Se trata de un grupo con valores, preferencias y conductas propias. Un grupo con actitudes hacia la tecnología, las finanzas y el gasto netamente diferente de las de las generaciones previas.
Los minoristas, fabricantes o proveedores de servicios con estrategias de marketing pensadas para los Millennials, deberá transformarlas. Para llegar a ellos deberán hacer algo más que reformular ligeramente sus estrategias de marketing.
Algunos de ellos pueden no tener más de 9 años, pero ya tienen un enorme poder adquisitivo. En Estados Unidos, la Generación Z tiene en la actualidad US$ 200.000 millones en poder adquisitivo directo. Pero además de eso tienen US$ 1 billón en poder adquisitivo indirecto por su influencia en el gasto familiar.
Sus avanzados conocimientos digitales los convierte en un grupo muy influyente en las decisiones del gasto familiar. Son grandes consumidores.
Para el año 2020, serán el más grande grupo de consumidores en todo el planeta. Representarán 40% de los consumidores en Estados Unidos, Europa y los países BRIC y 10% en el resto del mundo, según Booz Co. Las empresas que no sepan enganchar bien con ellos podrían perder rápidamente participación en sus mercados. No son mini-millennials;. Son diferentes.
Se diferencian de los Millennials en cuatro actitudes que tienen consecuencias directas para el marketing en el mundo post digital. Las empresas deberán tomarse el tiempo para entender las idiosincracias de este grupo: los Z tienen la atención ultra corta, pero tienen avidez de contenido auténtico; no creen en las instituciones financieras y, sin embargo, desean ahorrar y tener independencia financiera; viven inmersos en las redes sociales pero también quieren tener un impacto positivo en el mundo real.