Generalmente, la adquisición de talento es una de las prioridades de los grandes CEO. Inclusive con cifras de desempleo que rozan el 10% en países industrializados, encontrar y retener talento en el mercado de IT puede ser complicado. No se trata de conseguir una masa crítica de empleados sino a las verdaderas estrellas, a las que harán la diferencia.
Integrar talento nuevo a una organización cuesta dinero y, más importante aún, conlleva un esfuerzo en tiempo. Es, desde cualquier ángulo que se lo vea, una empresa riesgosa. Especialmente para quienes administran porque incluye buscar postulantes, llevar a cabo entrevistas, negociar contratos y establecer el proceso de contratación que puede llevar hasta seis meses.
Por lo tanto, la mejor estrategia es conservar el talento adquirido anteriormente. En áreas tradicionales, hay todo un camino de carrera que el empleado puede seguir. Pero en IT conviene rotar. Generalmente se empieza en un rol básico y se gana más responsabilidad gradualmente, demostrando experiencia, hasta hacerse cargo de proyectos. En IT impera otra mirada: rotar a las personas en otras áreas para que no se especialice en ninguna y pueda aportar frescura a la organización de diferentes maneras.
La clave a nivel inicial es que la instrucción sea menos técnica. Aunque se trata de conocimiento crítico, algunas instituciones están experimentando ampliando los temas en esas primeras semanas de entrenamiento. En algunos casos, proveer información sobre negocios resulta fundamental y ayuda a los empleados a entender que lo que hacen todos los días tiene un valor en el mundo real. Además, el rol del mentor es fundamental. Muchas organizaciones de IT encontraron la oportunidad de hacer interactuar a sus empleados directamente con los líderes de la empresa.
Tratar de estimular la pasión de los empleados de IT también debería ser prioridad. El mejor talento tiene gran pasión por la tecnología. Quieren una oportunidad para probar que son verdaderos innovadores; los próximos Steve Jobs. Quieren, más allá de todo, resolver problemas. En una organización, esta pasión puede perderse fácilmente. Si se les permite trabajar en proyectos individuales, como hizo Google con Labs, se estimulará la innovación pero puertas adentro.
Pero inclusive cuando todo esto funcione, lo cierto es que de vez en cuando será una buena idea incluir nuevo talento en la organización. Le dará “nueva sangre†a la empresa porque oxigenará con ángulos diferentes y perspectivas distintas.