El Grupo Adecco, empresa líder en el mundo en consultoría integral en Recursos Humanos, explica estas cinco tendencias. El manifiesto, realizado por la Confederación Mundial del Empleo para celebrar su 50° aniversario, fue titulado “No hay futuro laboral sin innovación social”, y tiene como objetivo construir mercados laborales más flexibles, inclusivos y sostenibles para las personas, las empresas y la sociedad en general. El Grupo Adecco es miembro fundador de esta organización y forma parte del Comité Directivo.
Las 5 tendencias que configuran el nuevo mundo laboral
1. Entornos económicos complejos y volátiles que desafían los modelos comerciales tradicionales: ejemplo de ello es la personalización en masa que ha reemplazado a la producción en masa, y la creación de plataformas de algunos negocios en respuesta al incremento de la demanda existente. También, la revolución de las start-up y una mayor inclinación por el emprendimiento desafiando al empleo en relación de dependencia. Además, los consumidores se transforman en “prosumidores”, reflejando un híbrido entre la producción y el consumo.
2. Nuevas organizaciones laborales basadas en proporcionar la cadena de suministro del talento global: por ejemplo, la externalización de actividades comerciales que generan empresas más amplias; además de empresas basadas en la ejecución de proyectos organizadas como una red de proveedores y socios “sin conexión directa”, y el uso de trabajo online.
- Nuevas actitudes con respecto al trabajo cuestionan las relaciones con el mundo corporativo: existe una fuerte demanda de la individualización de la relación laboral, el cumplimiento y la satisfacción en el trabajo como modo de impulsar el compromiso de los empleados, los grupos de trabajadores y generación “slasher” que mantienen distintos empleos de manera simultánea; y la gestión participativa y jerarquías planas (holocracia), a fin de impulsar la competitividad comercial.
- La digitalización redefine la gestión y las condiciones laborales: los límites poco definidos entre la vida privada y la vida laboral, sumado a que el lugar de trabajo ya no es un lugar al que hay que ir todos los días, son más bien espacios de trabajo cooperativo, teletrabajo y trabajo online. También, esto se ejemplifica a través del retorno de las industrias y empleos a su país de origen y la creación de nuevas fábricas pequeñas, y las empresas que se adaptan a diferentes formas de trabajo e implementan políticas para la gestión del talento.
- Capacidades y competencias como una fuente abierta: la masificación de la educación ha dado como resultado la fuerza de trabajo mundial más formada, potenciada con los cursos online masivos y abiertos, y los tutoriales que facilitan el desarrollo de las capacidades y contribuyen a una formación continua. Los portales de empleo garantizan el acceso al talento especializado e individual, y la inteligencia artificial, los robots y la automatización desplazarán a los trabajos actuales y crearán otras oportunidades laborales.
Acciones y políticas a seguir
Acceso para todos. Garantizar un acceso equitativo y total a los mercados laborales a través de distintas formas de trabajo:
– Adaptar las expectativas de los trabajadores y las necesidades de las empresas con la diversidad y flexibilidad en acuerdos contractuales laborales (garantizando la diversidad y la inclusión de todos los trabajadores, incluso los más vulnerables).
– Garantizar una regulación apropiada que asegure una competencia leal entre las diversas formas de trabajo.
– Priorizar las políticas del mercado laboral para las personas que requieran de mayor consideración y protección, tales como los jóvenes, desempleados de larga duración y los trabajadores informales.
– Estimular la creación de empleos a través de leyes laborales de negocios estables que todos puedan cumplir.
Un empleo justo para todos. Garantizar condiciones laborales decentes y apropiadas, independientemente del contrato laboral de cada persona, y considerando las preferencias de los trabajadores:
– La habilidad de garantizar un trabajo decente independientemente del contrato laboral de las personas.
– Asegurar que las condiciones laborales respeten los principios fundamentales y los derechos en el trabajo.
– Asegurar ingresos adecuados, a través de la negociación colectiva cuando sea necesario.
– Facilitar el acceso a la información con respecto a los derechos de los trabajadores.
– Considerar la diversidad de las personas en los mercados laborales con respecto a la representación sindical colectiva.
– Preservar y mejorar las condiciones de salud y seguridad para todos los trabajadores, incluyendo a los trabajadores con movilidad y trabajadores que trabajan remoto.
Hacia un nuevo acuerdo social. Implementación de programas de protección social modernizados para reflejar nuevos lugares de trabajo:
– Organización de beneficios sociales (salud, pensión, baja por enfermedad, vacaciones, etc.) de modo que sean fácilmente transferibles, garantizando la seguridad individual y los derechos de los trabajadores cuando finalice la relación laboral.
– Reconsiderar la financiación de la seguridad social con el fin de reducir los costes laborales no salariales.
– Evitar la desigualdad entre las diferentes formas de trabajo con respecto a los costes laborales y las contribuciones sociales.
– Favorecer la seguridad del mercado laboral por encima de la seguridad del empleo.
Capacitación para el empleo. Preparar a todos los trabajadores con las capacidades que necesitan para triunfar en el mercado laboral:
– Implementar un enfoque estratégico que desarrolle habilidades cognitivas (incluyendo la alfabetización, habilidades numéricas y resolución de problemas), competencias sociales (comunicación, capacidad de influir y negociar), así como también la disposición para aprender.
– Eliminar las barreras para el desarrollo de las capacidades y asegurar políticas de aprendizaje continuas, como por ejemplo: mejorar el acceso a la educación formal para los adultos, desarrollar oportunidades para formarse en el lugar de trabajo y proporcionar a los trabajadores flexibilidad para combinar el trabajo con la formación (especialmente a través de contratos de aprendizaje).
– Utilizar los períodos de desempleo como oportunidades para mejorar los conocimientos y/o recalificar a los trabajadores.
– Establecer un plan de formación individual para que los trabajadores puedan disfrutar de su derecho a la formación (independientemente de su relación laboral).
Intermediación responsable. Aplicar igualdad de condiciones entre los intermediarios del mercado laboral:
– Apoyar las relaciones laborales tripartitas (como los trabajos por agencia), como modo de conciliar la flexibilidad y la seguridad.
– Que los servicios de empleo públicos y privados trabajen conjuntamente para respaldar a los trabajadores en sus carreras.
– Implementar niveles de calidad para las contrataciones transfronterizas y garantizar que la regulación existente se cumpla.