La nueva CEO, Michelle Peluso, no ha cumplido todavía un año en su cargo. Pero, urgida por la necesidad, endulzó la píldora con frases optimistas en la nota que posteó en el blog de la intranet de IBM. “Llegó el momento de empezar el segundo acto: GANAR “. Ese era el título.
Abajo comenzaba así: “Le explico la única receta que conzco para el éxito. Sus ingredientes son, excelente personal, herramientas adecuadas, una misión, análisis de resultados y una cosa más: lugares de trabajo realmente inspiradores y creativos”.
Todo muy inspirador, pero el último punto cayó como balde de agua fría en el Departamento de Marketing. Eso quiere decir que las 2.600 personas que trabajan en el sector tendrán que trabajar juntas, codo a codo en alguna de las seis oficinas de IBM: Atlanta, Raleigh, Austin, Boston San Francisco y Nueva York. Los empleados que antes trabajaban desde sus casas ahora tendrán que viajar si están a una distancia posible. Los que estén más lejos deberán o mudarse o buscar otro trabajo.
Esta vez fue Marketing. Ya ocurrió lo mismo con otros departamentos y habrá más en el futuro.
