Se habla de las cuatro grandes: Amazon, Apple, Facebook y Google. O se habla de las Faang (Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google). En los dos casos la ausente es Microsoft. La compañía registró en el último año fiscal, más de dos veces y media lo registrado por Facebook, ocho veces más que la cifra anual de Netflix y le pisa los talones a Alphabet.
Microsoft ya no es la compañía del Windows. De la mano de su CEO, Saya Nadella, se ha convertido en una compañía para la nueva era de la tecnología, con servicios y licencias de software. Logró volver a crecer apostando a la nube y transformando completamente su modelo de negocios.
Los ingresos y ganancias provienen básicamente de tres negocios: productos de oficina (para aumentar productividad), Azure (la nube inteligente) y Windows (computacion personal y comercial). Esta diversificación le otorga muchas vías de crecimiento y rentabilidad. Lo más grande que tiene es Azure, que generó 76% del crecimiento de los ingresos en el último trimestre.
Antes la compañía, centrada en Windows y la PC, se mantenía cerrada a la colaboración. Se negó a poner Microsoft Office en la iPad y a trabajar con Linux, la plataforma de fuente abierta. Hoy, en cambio, el Office está en la iPad y en dispositivos Android, tiene sociedades con competidores como Salesforce y Dropbox y, con la adquisición de Github avanza en su compromiso con el software de fuente abierta. Hoy, más de 40% de las máquinas virtuales de Azure corren con Linux.
La compañía cambió profundamente su modelo de negocios al pasar de vender licencias de software a un servicio de suscripción basado en la nube. Si bien esto reduce los ingresos inmediatos provenientes de la venta de software, crea una corriente sostenida de ingresos hacia adelante. En cloud computing Azure ocupa el segundo puesto detrás de Amazon Web Services y delante de Google.