El gran futuro del e-mail

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Cuando se supere el debate que generó la práctica del spamming (envío masivo de correspondencia electrónica no solicitada), seguramente se convertirá en el instrumento más usado en marketing.

Hoy, los marketineros ya pueden enviar por e-mail mensajes uno-a-uno que contengan HTML, imágenes gráficas, audio y hasta hipervínculos.

Las versiones más nuevas de programas de correo electrónico también aceptan contenido que poco tiene que envidiarle a una página web.

Con la integración con bases de datos, el e-mail personalizado y automatizado va a ser muy bien aceptado por los usuarios porque brinda contenido y la publicidad que les interesa, porque reciben algo que tiene valor para ellos.

El e-mail con HTML y relacionado con base de datos todavía es una técnica nueva que no ha llegado a niveles masivos.

Según un estudio reciente de Forrester Research, 34% de las empresas que respondieron a la encuesta actualmente envía e-mail en HTML. En dos años más, 64% de esas empresas dijeron que lo habrán incorporado. La predicción que hace ese mismo estudio es que la práctica del spam irá desapareciendo gradualmente.

Poco a poco las newsletters y las actualizaciones por e-mail se están convirtiendo en un complemento estándar de la mayoría de los sitios web.

Algunas empresas ya están creando programas según los cuales los socios aceptan recibir e-mails para participar en encuestas y responder a publicidad. A cambio, el socio recibe puntos que puede redimir en forma de productos.

Las empresas han empezado a crear estos programas personalizados de visitantes o comprador frecuente para crear lealtad.

El e-mail es una herramienta que repara una de las desventajas de la Web, que reside en estar allá afuera esperando que la visite la gente.

El marketing con e-mails personalizados puede provocar visitas regulares y repetidas. Se advierte en los consumidores, dice el estudio de Forrester, una aceptación cada vez más generalizada en cuanto a recibir e-mails autorizados y dirigidos especialmente a ellos.

Hoy, los marketineros ya pueden enviar por e-mail mensajes uno-a-uno que contengan HTML, imágenes gráficas, audio y hasta hipervínculos.

Las versiones más nuevas de programas de correo electrónico también aceptan contenido que poco tiene que envidiarle a una página web.

Con la integración con bases de datos, el e-mail personalizado y automatizado va a ser muy bien aceptado por los usuarios porque brinda contenido y la publicidad que les interesa, porque reciben algo que tiene valor para ellos.

El e-mail con HTML y relacionado con base de datos todavía es una técnica nueva que no ha llegado a niveles masivos.

Según un estudio reciente de Forrester Research, 34% de las empresas que respondieron a la encuesta actualmente envía e-mail en HTML. En dos años más, 64% de esas empresas dijeron que lo habrán incorporado. La predicción que hace ese mismo estudio es que la práctica del spam irá desapareciendo gradualmente.

Poco a poco las newsletters y las actualizaciones por e-mail se están convirtiendo en un complemento estándar de la mayoría de los sitios web.

Algunas empresas ya están creando programas según los cuales los socios aceptan recibir e-mails para participar en encuestas y responder a publicidad. A cambio, el socio recibe puntos que puede redimir en forma de productos.

Las empresas han empezado a crear estos programas personalizados de visitantes o comprador frecuente para crear lealtad.

El e-mail es una herramienta que repara una de las desventajas de la Web, que reside en estar allá afuera esperando que la visite la gente.

El marketing con e-mails personalizados puede provocar visitas regulares y repetidas. Se advierte en los consumidores, dice el estudio de Forrester, una aceptación cada vez más generalizada en cuanto a recibir e-mails autorizados y dirigidos especialmente a ellos.

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