(Cada segundo sábado de junio se conmemora el Día Mundial del Bienestar, una iniciativa creada en 2012 para generar conciencia social sobre las consecuencias y la importancia que tienen la prevención y el bienestar en la salud y en la calidad de vida de las personas.)
“El bienestar emocional de los empleados es un aspecto clave, medular, que en tiempos tan complejos como los que estamos viviendo se hizo más evidente y necesario abordar, incluir y sostener”, advierte Ignacio Giménez Losano, cofundador de Co-Being, una start-up creada hace un año para ofrecer a las empresas distintos programas de bienestar.
“Cuando antes se escuchaba hablar del mundo del trabajo y del mundo del bienestar, parecía que ambos aspectos no podían superponerse. Afortunadamente hoy esa idea va perdiendo fuerza y la realidad viene demostrando no sólo que pueden coexistir, sino que incluir iniciativas para tratar el estrés y promover la salud mental y el equilibrio emocional trae aparejado para las empresas una gran cantidad de beneficios, entre los que se encuentran la mejora en la productividad y el retorno de la inversión”, agrega, por su parte, Emiliano Aguilar, cofundador de Co-Being.
De hecho, estudios recientes realizados por la Organización Mundial de la Salud y de la Organización Internacional del Trabajo demuestran que promover la salud y el bienestar de los empleados lleva a las empresas a ser más exitosas y competitivas.
El nuevo paradigma viene a instaurar al bienestar como un elemento constitutivo del propio ADN de una organización, y no un estado que los empleados deben buscar por fuera del ámbito de las oficinas, pymes, emprendimientos o grandes empresas.
¿Cómo se puede hacer para que el bienestar comience a formar parte de la cultura laboral? Las iniciativas son muchas y se pueden adaptar a cada compañía. Pueden ir desde brindar capacitaciones de desarrollo, talleres socioemocionales, propuestas de actividad física, yoga, meditación, servicio de nutrición, hasta habilitar espacios de escucha profesional y coaching ejecutivo individual”, señalan desde Co-Being.
Es importante además que cada empresa incorpore programas a medida, partiendo de un análisis de la situación actual, de datos precisos y teniendo en cuenta la experiencia de los empleados.
Para diseñar programas adaptados a cada necesidad, desde Co-Being se basan en informes de Engagement, del Nivel de Estrés Percibido y del “Employee Net Promoter Score” (ENPs), la herramienta que mide la probabilidad de que un empleado recomiende la organización como lugar de trabajo.