Por Dotti Peñate (*)
No obstante, esto no debe ser razón de desmotivación, ya que justamente hace que lo que sucede en Argentina no dependa tanto de lo que pasa internacionalmente.
Hace casi 18 años que, con mi marido, socio y actual presidente de RE/MAX Argentina, Sebastián Sosa, llegamos a este país con el objetivo de traer el modelo de negocio innovador de la marca. En estas casi dos décadas fuimos construyendo la visión de un emprendimiento, siempre apostando por el proyecto y enfocados para lograr que el éxito sea duradero.
DEFINIRSE COMO EMPRENDEDOR
La definición de emprendimiento implica encarar la vida de manera distinta, dejando la comodidad y la estabilidad de lo conocido, y hasta a veces el status quo. Para ser emprendedor, se necesita estar dispuesto a salir de la zona de confort para crear algo propio.
Desde mi punto de vista, un emprendedor necesita tener una visión ambiciosa para poder encararla con mucha pasión y convicción. La clave es no tener plan B y, en momentos de crisis, siempre sostener el proyecto y los compromisos asumidos. Sumar a las personas correctas para que sean parte del emprendimiento es un factor importante también.
SABER MANEJAR LOS VÍNCULOS
A veces, los negocios y los vínculos personales se entremezclan: en mi caso, yo decidí emprender con mi marido. La clave para que nuestro proyecto en común llegara a buen puerto fue que ambos compartimos la misma visión. Cuando tuvimos discrepancias en cómo llegar a ella, nos dimos cuenta la importancia de tener en claro los roles de cada quien y respetarlos, valorando nuestras diferencias y capitalizándolas.
LIDIAR CON LA FRUSTRACIÓN
Los inicios de un emprendedor generalmente no son fáciles. Se debe hacer de todo para salir adelante. Pero esto no tiene que ser motivo de frustración: con el tiempo, uno puede organizarse para bloquear tiempos, priorizando las tareas más importantes, además de sumar talento nuevo para poder dedicarse a lo que uno es bueno.
Lidiar con la frustración frente a una situación de fracaso es sin dudas uno de los desafíos de todos los emprendedores, pero uno aprende que este estilo de vida tiene muchos altibajos y hay que sentirse cómodo con la desilusión momentánea. Muchos emprendimientos no perduran porque la gente se rinde antes de tiempo.
LA VISIÓN: LO MÁS IMPORTANTE
Para no perder el foco en la meta hay que apoyarse en la visión. En nuestro caso, desde los inicios sostuvimos la idea de que RE/MAX iba a transformar la manera de hacer negocios inmobiliarios en la Argentina a lo largo y ancho del país, pero esta es una filosofía que puede aplicarse a cualquier tipo de emprendimiento para que sea exitoso.
Luego de casi dos décadas abocada al emprendedurismo, entiendo que un proyecto nunca deja de ser desafiante. Seguimos focalizados en el éxito del emprendimiento independientemente de cualquier resistencia o dificultad que el mercado pueda traer. Además, es necesario diseñar objetivos estratégicos y tácticos, estableciendo metas anuales, y que se sostengan en el tiempo a mediano y largo plazo, es decir de acá a 5 o 10 años.
Mirando en retrospectiva, cuando decidimos llegar a Argentina con RE/MAX nos imaginamos algo muy grande, pero no consideramos la cantidad de personas que cambiaron su vida al elegir ser parte de la red. Eso nos da una enorme satisfacción: ser una pequeña parte de los logros de más de 6.500 emprendedores que adhieren a la red y sus familias.
Estos logros son una muestra de que cuando se tienen los objetivos claros y se trabaja todo el tiempo con esto en mente y preguntándonos como emprendedores “¿cómo lo voy a hacer posible”, se puede llegar a tener un emprendimiento exitoso y duradero.
(*) CEO de RE/MAX Argentina y Uruguay.
