El título completo del libro, que está a punto de publicar la editorial Wiley, es “<em>Mainstreaming Corporate Responsibility: Cases and Text for Integrating Corporate Responsibility across the Business School Curriculum</em>” y argumenta el tema debe figurar en la currícula junto a estrategia, contabilidad, marketing y finanzas.
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<p> Contrariamente a lo que podría pensarse en tiempos de crisis, Smith cree que el tema adquiere mucha más importancia en la agenda empresarial.</p>
<p> La crisis financiera y sus efectos en la economía global ponen de manifiesto, dice, que la estabilidad del mercado global depende de una conducta responsable, de modelos sostenibles de negocios y de gerenciamiento proactivo como así también de marcos regulatorios.</p>
<p> Smith explica que el libro que publica junto a Gilbert Lenssen, intenta hacer en las escuelas de negocios lo que muchas empresas están haciendo, y es aceptar que CSR no puede ser simplemente un método que se agrega al funcionamiento normal del negocio sino algo profundamente incrustado en las operaciones diarias de la compañía.</p>
<p> Smith y Lenssen citan al desaparecido profesor de estrategia Sumantra Ghoshal, quien decía que las materias de estrategia, finanzas y economía se dictaban en las universidades en forma totalmente desconectada de cualquier consecuencia moral o social, y por lo tanto debían ser denunciadas como la causan original de las deficiencias éticas en educación empresarial.</p>
<p> Pero Smith añade que Lenssen y él no creen que sea necesario un cambio radical en los programas universitarios. Creen, sí, en cambios incrementales que expliquen en qué consiste un negocio. Ellos creen que se presta demasiada atención al tema de maximizar el valor para los accionistas y no la suficiente a los propósitos más amplios de la firma y también los supuestos sobre las consecuencias ideológicas que vienen con esta visión de maximizar valor para el accionista.</p>
<p> “Sin embargo, los acontecimientos recientes parecen sugerir que las empresas, o al menos sus directivos, no han estado maximizando valor para el accionista. Recientement hemos visto una de las más grandes destrucciones de valor para el accionista e – si no la mayor – y protagonizada por esos mismos directivo que deberían haber sido custodios de ese valor. Esa conducta socialmente irresponsable tiene amplias repercusiones y todos estamos sufriendo en consecuencia.”</p>
<p> Dicho eso, nunca hubo mejor momento que ahora para reagrupar, y Smith aconseja descartar la vieja noción de que los programas de Responsabilidad Corporativa (RC) están orientados hacia Relaciones Püblicas (RP) y pensados para “crear buena voluntad como una suerte de política de reaseguro, que se redimirá en caso que algo salga mal en la parte principal del negocio.”</p>
<p> Agrega que el enfoque “desacoplado” de muchos empresas hacia responsabilidad corporativa. Que da apariencia de conformidad a procesos y resultados socialmente, debe dar paso a una política integrada que afecte la toma de decisiones y acciones cotidianas de la organización en todos los niveles. </p>
<p> Ése es el núcleo de los que ellos llaman “mainstreaming RC” o sea poner el concepto de responsabilidad en el centro de todas las acciones. Fácil de poner en papel, muy difícil de implementar porque viene acompañado de grandes desafíos y requiere un proceso de cambio planificado.</p>
<p> La ventaja es que cada vez más empresas están advirtiendo que la responsabilidad social de la empresa y la sostenibilidad están ligadas a la competitividad; Y la sostenibilidad bien podría ser el próximo gran cambio al que las empresas deberán adaptarse. </p>
Crisis y responsabilidad social de las empresas
Craig Smith, profesor en INSEAD de ética y responsabilidad social, dice en su libro Mainstreaming Corporate Responsibility que las escuelas de negocios deberían poner la responsabilidad social de las empresas en el centro mismo de su currícula.