Al asignar un valor menor a esas opciones, que según las nuevas leyes contables tendrán que ser registradas como gastos en los libros de la compañía a partir del próximo mes de julio, Cisco reduciría el impacto que los gastos tendrán en sus ganancias y tal vez haría que otras empresas adopten un mecanismo similar. La compañía dijo que si aplicara el estándar tradicional de valuación, como el modelo Black-Scholes para asentar el costo de sus opciones accionarias, sus ganancias caerían aproximadamente 20%. Las opciones dan a los empleados el derecho a comprar acciones durante un período de hasta 10 años al precio fijado cuando se emitió la opción, y así pueden valorizarse mucho si el precio del capital sube durante ese período.
Cisco, el gran fabricante de equipos para dirigir el tráfico en Internet, propone crear un mercado vendiendo nuevos títulos basados en las opciones de los empleados. Si lo logra, la compañía podría estar cambiando los términos del debate sobre cómo asentar las opciones accionarias. Pero detalles como cuáles títulos decida vender, y de qué forma los comercialice, serán lo que en última instancia decida la forma en que el método funcione en la práctica.
El tema es importante porque Cisco otorga opciones a todos sus empleados y porque será una de las primeras compañías en acatar la nueva ley contable que exige asentar las opciones. Esa ley, adoptada luego de un duro debate por el Financial Accounting Standards Board (comisión de estándares contables y financieros), entra en vigor el 15 de junio para los años fiscales que comiencen después de esa fecha. El año fiscal de Cisco comienza el 31 de julio. En su último año fiscal, otorgó 188 millones de opciones a sus empleados. La compañía reveló que si se hubiera visto obligada a asentar el valor de esas opciones como gasto, su ingreso neto habría caído 28%, a US$3.200 millones.
Los títulos serían vendidos solamente a inversores institucionales. Cisco vendería nuevos títulos cuando emitiera opciones para sus empleados y luego los usaría para valuar esas opciones en sus libros.
Al asignar un valor menor a esas opciones, que según las nuevas leyes contables tendrán que ser registradas como gastos en los libros de la compañía a partir del próximo mes de julio, Cisco reduciría el impacto que los gastos tendrán en sus ganancias y tal vez haría que otras empresas adopten un mecanismo similar. La compañía dijo que si aplicara el estándar tradicional de valuación, como el modelo Black-Scholes para asentar el costo de sus opciones accionarias, sus ganancias caerían aproximadamente 20%. Las opciones dan a los empleados el derecho a comprar acciones durante un período de hasta 10 años al precio fijado cuando se emitió la opción, y así pueden valorizarse mucho si el precio del capital sube durante ese período.
Cisco, el gran fabricante de equipos para dirigir el tráfico en Internet, propone crear un mercado vendiendo nuevos títulos basados en las opciones de los empleados. Si lo logra, la compañía podría estar cambiando los términos del debate sobre cómo asentar las opciones accionarias. Pero detalles como cuáles títulos decida vender, y de qué forma los comercialice, serán lo que en última instancia decida la forma en que el método funcione en la práctica.
El tema es importante porque Cisco otorga opciones a todos sus empleados y porque será una de las primeras compañías en acatar la nueva ley contable que exige asentar las opciones. Esa ley, adoptada luego de un duro debate por el Financial Accounting Standards Board (comisión de estándares contables y financieros), entra en vigor el 15 de junio para los años fiscales que comiencen después de esa fecha. El año fiscal de Cisco comienza el 31 de julio. En su último año fiscal, otorgó 188 millones de opciones a sus empleados. La compañía reveló que si se hubiera visto obligada a asentar el valor de esas opciones como gasto, su ingreso neto habría caído 28%, a US$3.200 millones.
Los títulos serían vendidos solamente a inversores institucionales. Cisco vendería nuevos títulos cuando emitiera opciones para sus empleados y luego los usaría para valuar esas opciones en sus libros.