Desde principios de 2018 Philip Morris viene sacando en los diarios británicos una campaña publicitaria que presenta como parte de su objetivo de lograr un futuro sin tabaco. La dueña de la marca Marlboro envió además una carta a la Primer Ministro Theresa May solicitando se le permita publicar información en los paquetes sobre dejar de fumar cigarrillos.
Esto último fue lo que desató una reacción en contra por parte de los grupos anti tabaco, quienes acusan a la compañía de “total hipocresía”. El texto del último aviso dice: “Nuestra decisión para el Año Nuevo: “Estamos intentando dejar los cigarrillos”. E invita a los fumadores a ir a un sitio nuevo donde hay información sobre dejar el hábito de fumar y cambiar a alternativas al tabaco.
Pero Cancer Research UK acusa a la firma de estar intentando fomentar sus propias alternativas, como el tabaco caliente. “Es una hipocresía. La mejor manera de que Philip Morris pueda ayudar a la gente a dejar de fumar es no fabricar más cigarrillos”, dice George Butterworth, gerente de política tabacalera de Cancer Research.
La ONG dice que el hábito de fumar es la principal causa evitable e insta a la gente a dejar totalmente el hábito de fumar sin recurrir a los cigarrillos electrónicos.
