Lo cierto es que si no se sabe cuáles son las tendencias que se vienen, el negocio o la marca corren peligro.
Una reseña que se comentaron en la Digital Ascendant Conference en Silicon Valley en octubre 2016 que reunió a las marcas más grandes del mundo para conversar sobre Marketing Digital.
- No crear contenido simplemente por crear contenido. Todas las empresas saben que deben crear contenido. Lo que a veces se olvidan es que debe haber una estrategia de contenido ligada a las metas de la empresa.
- El marketing de influencers sigue creciendo como tendencia. Se lo debe mirar, no como una curiosidad sino como parte de la estrategia central de marketing. Lo más interesante es que brinda la oportunidad de crear una base de datos que la marca puede controlar.
- Los días de la agencia generalista están contados. El marketing evoluciona y la cantidad de canales que hay que incorporar al plan vuelven la tarea cada vez más compleja. Por pura necesidad, las agencias se están especializando. Muy pronto su experiencia va a ser cada vez más profunda, no amplia.
- El giro hacia el negocio centrado en el cliente significa que todos los departamentos deben actuar al unísono: el cliente viene primero. Esto coloca al gerente de marketing en una nueva posición de poder y responsabilidad sobre la forma en que la empresa se conecta con sus clientes. La experiencia de marca se forma con cada uno de los puntos de toque que el cliente tiene con la compañía. Por eso todos los sectores de la compañía deben estar embarcados en el plan de marketing.
- Big Data significa que no hay excusas que justifiquen el tomar malas decisiones de marketing. Como los datos muestran cuáles decisiones conducen a cuáles resultados, los agentes de marketing pueden saber cuáles inversiones rindieron buenos resultados. Big Data significa que los gerentes de marketing se sientan a la mesa con la información que necesitan para tomar mejores decisiones.
- Las marcas deben comenzar a prestar atención a los competidores que son nativos digitales. Hay una nueva generación de empresas que son nativas digitales. Hay que tenerlas en cuenta como competidores serios. No hacerlo es un gran error. Las marcas que no invirtieron a tiempo en digitalizarse, que fueron lentas en entender el valor de digitalizarse, están siendo aplastadas por las competidoras jóvenes.