Se agranda el mercado de los orgánicos

Aunque el fenómeno no es nuevo, ahora sí se advierte que en Estados Unidos la gente cuida su salud vigilando lo que come. Este proceso favorece las variedades orgánicas o naturales de los alimentos de uso cotidiano.

7 abril, 2006

Algunas de las marcas orgánicas y naturales más exitosas nacieron de una necesidad que fue creciendo paulatinamente y desde hace mucho tiempo. Las comidas preparadas para bebés y niños pequeños marca Earth’s Best nacieron en 1985, cuando una pareja de agricultores orgánicos advirtió que no encontraban en el mercado ningún alimento preparado sin conservantes para dar a sus hijos. Así nació la marca y para 1995 Earth’s Best ya ofrecía 50 productos diferentes. Luego de un breve período en que fue adquirida por Heinz, en el año 2000 pasó a manos del gran conglomerado neoyorkino llamado Hain Celestial Group.

Algo más tarde, en la zona de Boston, Steve Gelerman también se inspiró en las necesidades de sus hijos para llenar un hueco en el mercado. Bajo la marca Ian´s Natural Foods apareció una nueva generación de comidas listas y congeladas para niños, totalmente naturales.

Como queda claro que cada vez son más los estadounidenses que no sólo han decidido llevar una vida más sana sino también criar una generación comprometida con la salud y el bienestar, los alimentos orgánicos y naturales se está poblando con una interesante combinación de entrepreneurs, marcas históricas que se reinventan y marcas nuevas que se hacen un lugarcito dentro del segmento. Y para todos ellos, el común denominador que decide el éxito es una fórmula ganadora de confianza y sabor.

Estos alimentos cuestan un poco más, por eso sus fabricantes advierten la importancia de explicar los beneficios con la mayor claridad. No alcanza en este caso con promocionar los productos; es necesario promocionar un nuevo estilo de vida, con un contenido que “eduque” a los consumidores para convertirlos en seguidores, dice Kim Bremer, gerente de categoría de Earth’s Best.

Con el crecimiento del sector, los minoristas que comercializan estos productos se han convertido en un mercado competitivo que se destaca por promocionar un nuevo modo de vivir y hasta crear nuevas comunidades. La cadena Wild Oats, por ejemplo, fundada en 1987, fue creada – dicen en su página web – “con la visión de mejorar la vida de nuestros clientes con productos y educación que apoye la salud y el bienestar.”

“El éxito en este negocio está en mantenerse fieles al mensaje y misión pero además en saber crear una comunidad que atraiga nuevos clientes”, elabora Laura Coblentz, vicepresidenta de marketing de la cadena. Estilo de vida abarca todo: comida, información, vitaminas y suplementos, recetas, libros, cuidado del cuerpo. En Oats incluimos todo eso”.

Algunas de las marcas orgánicas y naturales más exitosas nacieron de una necesidad que fue creciendo paulatinamente y desde hace mucho tiempo. Las comidas preparadas para bebés y niños pequeños marca Earth’s Best nacieron en 1985, cuando una pareja de agricultores orgánicos advirtió que no encontraban en el mercado ningún alimento preparado sin conservantes para dar a sus hijos. Así nació la marca y para 1995 Earth’s Best ya ofrecía 50 productos diferentes. Luego de un breve período en que fue adquirida por Heinz, en el año 2000 pasó a manos del gran conglomerado neoyorkino llamado Hain Celestial Group.

Algo más tarde, en la zona de Boston, Steve Gelerman también se inspiró en las necesidades de sus hijos para llenar un hueco en el mercado. Bajo la marca Ian´s Natural Foods apareció una nueva generación de comidas listas y congeladas para niños, totalmente naturales.

Como queda claro que cada vez son más los estadounidenses que no sólo han decidido llevar una vida más sana sino también criar una generación comprometida con la salud y el bienestar, los alimentos orgánicos y naturales se está poblando con una interesante combinación de entrepreneurs, marcas históricas que se reinventan y marcas nuevas que se hacen un lugarcito dentro del segmento. Y para todos ellos, el común denominador que decide el éxito es una fórmula ganadora de confianza y sabor.

Estos alimentos cuestan un poco más, por eso sus fabricantes advierten la importancia de explicar los beneficios con la mayor claridad. No alcanza en este caso con promocionar los productos; es necesario promocionar un nuevo estilo de vida, con un contenido que “eduque” a los consumidores para convertirlos en seguidores, dice Kim Bremer, gerente de categoría de Earth’s Best.

Con el crecimiento del sector, los minoristas que comercializan estos productos se han convertido en un mercado competitivo que se destaca por promocionar un nuevo modo de vivir y hasta crear nuevas comunidades. La cadena Wild Oats, por ejemplo, fundada en 1987, fue creada – dicen en su página web – “con la visión de mejorar la vida de nuestros clientes con productos y educación que apoye la salud y el bienestar.”

“El éxito en este negocio está en mantenerse fieles al mensaje y misión pero además en saber crear una comunidad que atraiga nuevos clientes”, elabora Laura Coblentz, vicepresidenta de marketing de la cadena. Estilo de vida abarca todo: comida, información, vitaminas y suplementos, recetas, libros, cuidado del cuerpo. En Oats incluimos todo eso”.

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