La fortaleza de los lazos débiles
Hoy todos están en los medios sociales y compiten entre sí para crear sus redes de seguidores en Twitter, amigos en Facebook y conexiones en Linkedin. Pero más que contar amigos, seguidores o conexiones lo que habría que hacer es averiguar cómo aprovechar mejor a los pocos que convienen.
22 febrero, 2012
<p>En su columna en Chief Executive, Don Peppers cree que la mayoría de nosotros no somos muy estratégicos en cuanto a la mejor forma de aprovechar el enorme potencial de nuestras propias redes sociales. <br />
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Para el caso de una persona que busca empleo, por ejemplo, se sabe que recurrir a las redes es la mejor forma de averiguar dónde hay oportunidades, pero hay una manera más inteligente de usar la red aunque muchos no la adviertan. Hace unos 30 años, un estudio demostró de manera concluyente que los mejores avisos sobre oportunidades laborales suelen venir de amigos y colegas distantes, y no se los más cercanos. Esto no es porque los grandes amigos no nos den buenas recomendaciones, sino porque con los más íntimos usted más o menos comparte las noticias sobre oportunidades, algo que no ocurre con gente no tan cercana a usted. <br />
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Este principio, conocido como “la fortaleza de los lazos débiles”, tiene otras aplicaciones estratégicas. Dos capitalistas de riesgo descubrieron, por ejemplo, que las firmas de inversión que comparten información con otras en lo que concierte a posibles candidatos de inversión tienden a ganar acceso a una red más amplia de candidatos, aprovechando sus lazos más débiles de la red en lugar de concentrarse exclusivamente en los lazos fuertes. <br />
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Además, el poder de los lazos débiles es importante cuando se trata de generar ideas creativas o innovadoras. Todas las nuevas ideas vienen de combinar ideas y conceptos anteriores. Esta de una de las razones de por qué un grupo de personas con ideas totalmente independientes tiene más posibilidades de llegar a una conclusión mejor y más creativa que una persona actuando en solitario, por más inteligente que sea. Las ideas y las innovaciones existen en una red: algunas ideas se conectan con otras, clusters de ideas dentro de otros clusters y así. Nuestras mejores ideas llegarán cuando aprovechemos nuestros lazos débiles interactuando con las disciplinas que uno conoce menos, o los expertos que rara vez consultamos o la gente a quien menos vemos. <br />
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Por el contrario, la forma más segura de no dar con ideas novedosas es confiar en todos los expertos que ya conocemos y todas las disciplinas que nos resultan familiares. Finalmente, si todo lo que están está tratando de hacer es avanzar su propia carrera en la forma donde ya está trabajando, el argumento los “lazos débiles” también le ayudará a apreciar mejor a qué ejecutivos debería tratar de agregar a su red.</p>
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