El mercado inmobiliario argentino atraviesa una etapa marcada por cambios y limitaciones en el acceso al crédito hipotecario. Los últimos reportes del sector señalan una disminución superior al 35% en el volumen de préstamos otorgados durante los últimos meses, mientras que algunas líneas hipotecarias ya superan el 15% de tasa en distintos bancos.
Este escenario llevó a que la inversión en pozo vuelva a posicionarse como una de las alternativas disponibles tanto para el acceso a la vivienda como para el resguardo de capital. Esta modalidad permite a los inversores ingresar a proyectos inmobiliarios en etapas iniciales y acceder a esquemas de pago adaptados a la coyuntura económica.
En línea con esta tendencia, GCH (Grupo Chomer) se consolida como un actor relevante en el sector. La compañía ofrece esquemas de financiación que se ajustan a las características particulares de cada desarrollo, contemplando condiciones específicas que buscan aportar previsibilidad ante la inflación.
Entre las opciones disponibles, GCH (Grupo Chomer) presenta la posibilidad de abonar en hasta cincuenta cuotas en pesos argentinos, con ajuste por el índice CAC (Cámara Argentina de la Construcción) y un anticipo equivalente al 30% del valor total. Esta alternativa responde a la necesidad de contar con mecanismos de pago flexibles en un contexto de alta volatilidad financiera.
La propuesta de GCH se enmarca dentro de las estrategias del sector inmobiliario para responder a la caída del crédito y ofrecer alternativas de inversión adaptadas a las nuevas condiciones del mercado, según informó la compañía.












