La transformación de la movilidad urbana se acelera en el contexto del Día de la Movilidad Sostenible, bajo el impulso de regulaciones orientadas a reducir el consumo energético y la huella de carbono. Los plásticos se consolidan como materiales centrales en el diseño de vehículos más eficientes y seguros, alineados con los nuevos estándares ambientales.
Un automóvil promedio incorpora 120 kg de plásticos, equivalentes al 15% de su peso total. Esta inclusión permite diseños hasta 50% más livianos que los realizados con materiales alternativos, lo que se traduce en ahorros de combustible del 25% al 35% y una reducción aproximada de 20 kg de dióxido de carbono por cada kilogramo de peso durante la vida útil del vehículo. Elementos como paragolpes, tanques de combustible, cinturones y airbags dependen de polímeros avanzados para mejorar la seguridad.
En el plano internacional, el World Economic Forum impulsa el rediseño de componentes, la certificación de materiales y la ampliación de la infraestructura de recuperación. La Unión Europea avanza hacia una normativa que exigirá un 20% de plásticos reciclados en vehículos en seis años y 25% en diez, estableciendo la circularidad como condición legal, ambiental y competitiva. La demanda creciente de vehículos eléctricos incrementa el uso de plásticos livianos, lo que plantea nuevos desafíos para el reciclaje a gran escala.
En Argentina, cerca del 8% de los plásticos producidos se destinan a la industria automotriz y de la movilidad, aportando ligereza y eficiencia a piezas como paneles interiores, carcasas, paragolpes, partes no estructurales y sistemas de iluminación. Herramientas como la Certificación INTI–Ecoplas verifican el porcentaje real de plástico reciclado en productos, alineando a la industria local con estándares internacionales.
“La movilidad sustentable necesita innovación y materiales que acompañen el cambio. Los plásticos reciclados permiten fabricar vehículos más livianos, eficientes y duraderos, y al mismo tiempo reintegran residuos al circuito productivo como nueva materia prima”, dijo Verónica Ramos, directora ejecutiva de Ecoplas.
Durante 2024, en Argentina se recuperaron 233.200 toneladas de plásticos y otras 30.300 toneladas fueron valorizadas energéticamente, fortaleciendo el empleo verde y disminuyendo la presión sobre nuevos recursos, de acuerdo con datos relevados en el sector.












