Las dos naciones acordaron normalizar relaciones, permitir viajes, comercio y probablemente también abrir oficinas diplomáticas. Representantes de ambos países se reunirán a la brevedad para comenzar a firmar acuerdos.
Desde el Salón Oval, Trump dijo que Estados Unidos es parte en este tratado por haber ayudado en las conversaciones entre ambos países como pate del esfuerzo por pacificar el Medio Oriente.
Estados Unidos también participó hace muchos años en los esfuerzos por normalizar las relaciones de Israel con Egipto y Jordania.
El anuncio da a Trump una importante victoria de relaciones exteriores en un año electoral. También permite a Netanyahu presentarse como pacificador y convertirse en el tercer líder israelita en firmar la paz con sus vecinos.
Los líderes de Palestina ni han hecho comentarios y versiones procedentes de la franja occidental afirman que les tomó por sorpresa.
Un funcionario de la OLP (Organización por la Liberación Palestina) que habló en forma anónima porque no está autorizado a hablar con los medios, dijo que “nadie sabe nada”. Si resulta que Netanyahu aceptó abandonar sus planes de anexar terrenos de la franja occidental, eso sería bienvenido”, agregó. “Pero lo que supongo que vamos a ver otra vez es a un país árabe llevándose algo para así”.