El informe de ejecución del presupuesto del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires correspondiente al segundo trimestre de 2014, que realiza la Asociación Argentina de Presupuesto, marca que “teniendo en cuenta que en el primer trimestre la diferencia a favor del resultado de 2014 había sido del 56,3%, y que la caída de la actividad económica se ha empezado a sentir con más fuerza en las finanzas locales, se mantiene la previsión deficitaria, que inclusive podría superar lo establecido en el presupuesto sancionado.
Al cierre del primer semestre, el resultado financiero de la Ciudad marcó un superávit de $3.943,9 millones, a partir de ingresos que llegaron a los $30.438,1 millones y de gastos que totalizaron $26.494,3 millones.
Dado que los intereses de la deuda pública alcanzaron los $598,8 millones, el resultado primario también fue positivo en $4.542,7 millones.
El superávit financiero fue 42,6% superior al registrado en el mismo período de 2013, equivalente a $1.178,3 millones más, como consecuencia de una mejor performance de los ingresos (+35,8% ia.) que de los gastos (+33,9% ia.).
En estos primeros seis meses, el Gobierno de la Ciudad recaudó $30.438,1 millones, con un crecimiento del 35,8% con respecto a los $22.418,8 millones que se habían percibido en el mismo período de 2013.
En el acumulado de los últimos 12 meses la tasa de crecimiento es de 37,6%, lo que marca la desaceleración que viene registrando la recaudación porteña.
Esa tendencia se confirma al observar que si se analiza únicamente el segundo trimestre el incremento fue de 28,5%, por debajo de la tasa de inflación local medida por el GCBA.
De los $8.019,3 millones de incremento percibidos en el semestre, casi dos tercios (65,4%) correspondieron al Impuesto Sobre los Ingresos Brutos, en tanto que el Impuesto Inmobiliario aportó 9,2%, la Coparticipación Federal de Impuestos 8,6%, el Impuesto a los Sellos fue responsable del 7,5%, el Impuesto Automotor de 6,1% y el resto de los recursos apenas contribuyó con 3,2%.
El Impuesto Sobre los Ingresos Brutos, históricamente la principal fuente de recursos de la Ciudad, marcó el ritmo general de la recaudación al crecer un 39,4% en el acumulado anual, un 37,0% en el semestre y 30,1% en el trimestre.
Al estar íntimamente ligado a la evolución de la actividad económica, esta desaceleración muestra el impacto que ha tenido la caída en el consumo sobre los recursos porteños, aunque el ISIB fue el que mostró la mejor performance de los tributos que gravan la producción, el consumo y las transacciones.
Por la estructura productiva de la Ciudad, concentrada en los servicios, el impacto de las variaciones en el ciclo económico se suele percibir con uno a dos trimestres de retraso con respecto al resto del país.
De las grandes fuentes de recursos porteñas, sólo los impuestos Inmobiliario y Automotor, es decir, aquellos que gravan el patrimonio, mostraron una aceleración en el trimestre.
Más allá de las discusiones que se puedan plantear sobre si estas variaciones corresponden efectivamente a incrementos de riqueza o simplemente a la actualización inflacionaria, corresponde resaltar la fuerte dependencia que muestra la estructura tributaria local con respecto a los impuestos sobre el consumo y la actividad económica, y la falta de mecanismos que permitan compensar esa situación una vez que se ingresa en la fase descendente del ciclo.
En lo que hace al gasto, la ejecución del Gobierno de la Ciudad alcanzó los $26.494,3 millones. Si bien este valor es 34,8% superior al registrado en el mismo período de 2013, en la comparación con el nivel de ejecución se observa una caída de 3,6 puntos porcentuales (43,5% en 2014 contra 47,1% en 2013).
Los Gastos Corrientes crecieron 32,5%, mientras que, en términos relativos, el mayor incremento correspondió al Gasto de Capital, que aumentó 51,9% ia.
No obstante, si se tiene en cuenta que en el primer trimestre la inversión pública había crecido a una tasa de 123,9% y los Gastos Corrientes al 35,0%, la tasa de expansión del gasto público local muestra una desaceleración.
Las Remuneraciones al Personal tuvieron una suba de 23,8% ia., por debajo del promedio de gastos. Como se explicara en el informe del primer trimestre, ello se debe a que en los primeros meses del año pasado se habían registrado aumentos salariales a cuenta de lo que se acordara a lo largo del ejercicio, por lo que se estima que en el segundo semestre se acelerará la tasa de crecimiento salarial.
A nivel de jurisdicción, el porcentaje de ejecución es particularmente alto en la Procuración de la Ciudad (65,5%), que en los últimos años siempre ha mostrado disparidades entre lo presupuestado originalmente para sueldos y lo efectivamente ejecutado.
Los Gastos de Consumo totalizaron $6.042,0 millones, lo que corresponde a 45,3% del crédito vigente, con una suba de 64,0% interanual y un nivel de ejecución superior en casi seis puntos porcentuales al del primer semestre de 2013 (45,3% vs. 39,5%).
De ese total, los Bienes de Consumo devengaron $570,2 millones, 64,7% más que un año atrás. Si bien las subas fueron importantes en casi todas las partidas principales (Productos alimenticios +97,1%; Textiles y Vestuario +71,3%), el grueso del incremento correspondió a los medicamentos del sistema de salud porteño, que llegaron a los $173,9 millones, 68,5% más que en el primer semestre de 2013.
El incremento en la ejecución fue muy superior al del crédito vigente, que creció 19,4%. Los Servicios no Personales llegaron a los $5.461,0 millones, con una suba de 64,5% ia.
El mayor aumento se dio en la partida de Mantenimiento, Reparación y Limpieza, que creció 100,5% y alcanzó los $3.064,1 millones.
Allí se registra el contrato de recolección de residuos, el más importante de los que tiene la Ciudad, que tuvo un aumento de 103,9% y llegó a los $2.520,8 millones.
Sin embargo, a ese monto hay que descontarle el correspondiente al mes de diciembre de 2013, que se imputó a este ejercicio.
De todos modos, el aumento es muy importante y se va acelerando a medida que transcurre el tiempo. Otras partidas importantes dentro del inciso fueron los contratos con empresas ($596,5 millones; +46,7% ia.) y con personas físicas ($584,6 millones; +36,1% ia.).
Las Transferencias Corrientes alcanzaron los $3.078,8 millones, con una suba del 17,0%. 32,4% de ese total correspondió a los subsidios a colegios privados, que llegaron a los $999,0 millones, aunque en términos porcentuales el incremento fue de 10,6% ia.
También se destacaron las transferencias al Hospital Garrahan -mantenido en partes iguales por la Ciudad y el Estado Nacional- que tuvieron un aumento de 56,8% ia. y alcanzaron los $350,0 millones, y el programa de asistencia social Ciudadanía Porteña, con una ejecución de $245,3 millones y un crecimiento de sólo 8,5% ia.
El Gasto de Capital, por su parte, creció 51,9% de un año a otro, alcanzando los $1.199,9 millones y transformándose en el componente más dinámico del gasto.
Sin embargo, esa tasa es muy inferior a la registrada en el primer trimestre, cuando había alcanzado 123,9%. Esta desaceleración está en línea con el impacto de la disminución de la actividad económica sobre las finanzas locales, ya que debido a la estructura impositiva porteña, y a la falta de un fondo anticíclico, el gasto en infraestructura es el primero en disminuir ante una fase recesiva del ciclo.
Entre los principales proyectos de inversión desde el punto de vista presupuestario se destacan el Mejoramiento de las Vías de Tránsito Peatonal y Vehicular, con $264,8 millones; el Cuidado y Puesta en Valor de Espacios Verdes, con $232,0 millones; la compra de netbooks para alumnos de las escuelas primarias de la Ciudad por $204,8 millones y las Obras de Infraestructura Urbana en Red de Subterráneos, con $197,6 millones.
Por Transferencias de Capital, por último se devengaron $81,6 millones, un 36,6% menos que en 2013. De ese total, $70,0 millones correspondieron a lo enviado a la Corporación Buenos Aires Sur Sociedad del Estado.
La ejecución por finalidad se ubica en niveles muy homogéneos, que van del 43,2% de los Servicios de Seguridad a 45,8% de los Servicios Económicos, pasando por 45,4% de los Servicios Sociales y 43,7% de los Servicios de la Deuda Pública.
Sólo la Administración Gubernamental escapa a esa lógica, con 31,5% de devengamiento, aunque aquí influyen directamente las jurisdicciones extra poder ejecutivo que no están integradas al Sistema de Gestión y Administración Financiera (SIGAF) e informan su ejecución con posterioridad.
En cuanto a la situación de la deuda pública, el monto total del endeudamiento autorizado al Gobierno de la Ciudad para 2014 ascendió a $4.129,8 millones.
A su vez, el stock de deuda informado al 30 de junio es de $15.710,7 millones y la deuda flotante de $2.775,4 millones.