Debido al creciente rol que tiene la digitalización en la vida financiera de las personas a nivel global, los pagos electrónicos ocupan un lugar central en dicha transformación.
A nivel global se proyecta que el volumen de pagos sin efectivo aumente más del 80% de 2020 a 2025, un incremento aproximado de 1 billón a 1,9 billones de transacciones, y que la cantidad de transacciones per cápita casi se triplique para 2030, según el estudio global “Payments 2025 & Beyond” de PwC, que ofrece una visión sobre las principales tendencias del sector de medios de pago y revela que el boom de los pagos electrónicos es prueba de un cambio firme hacia una economía digital.
Según el reporte, la región de Asia Pacífico tendrá el crecimiento más rápido en el volumen de pagos electrónicos, aumentando un 109% de 2020 a 2025, seguido por África que pasará del 64% al 78%, y Europa, del 39% al 64%. En cuanto a América latina, la tasa de crecimiento será del 48% al 52%, y en Estados Unidos y Canadá del 35% al 43%.
“Enviar un mensaje de texto para pagar un boleto de colectivo en Turquía o utilizar un código QR para comprar en un supermercado en China, son ejemplos de lo que podrá ser una sociedad global sin efectivo. La pandemia tan solo aceleró un cambio que ya estaba en proceso” explica Rosana Mazza, socia de PwC Argentina especialista en servicios Digitales. Y también advierte: “el incremento de los pagos digitales si bien generará nuevas oportunidades para el ecosistema de pagos, incluyendo a los bancos, también expondrá las debilidades de aquellas empresas que no estén preparadas para adaptarse.”
Tendencias macro
El estudio de PwC también revela las tendencias claves que están influyendo en el negocio de pagos y resalta la importancia para los equipos de liderazgo de los jugadores de la industria de tenerlas en cuenta en su proceso de planificación:
- Inclusión y confianza
En los países en desarrollo, la inclusión financiera seguirá siendo impulsada por los dispositivos móviles y el acceso a mecanismos de pago accesibles y convenientes. Para 2025, la penetración de smartphones probablemente alcance el 80% a nivel mundial, en gran medida gracias a su adopción en los mercados emergentes como Indonesia, Pakistán y México.
Monedas digitales
Se espera que las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC, por sus siglas en inglés) causen el mayor impacto disruptivo en los próximos 20 años.
- Billeteras digitales
Con vistas al futuro, el 86% de los participantes estuvo de acuerdo con la predicción de que los proveedores tradicionales de servicios de pago colaborarán con las fintech y los proveedores de tecnología como fuente principal de innovación.
- Batalla de los rieles
Se esperan importantes desarrollos en las diferentes regiones del mundo hacia infraestructura de pagos basados en el acceso directo a las cuentas. Iniciativas claves en proceso de implementación en Latinoamérica. El Sudeste Asiático y Europa dan testimonio de dicho movimiento.
- Pagos internacionales
Según el informe, un 42% de los participantes creen que habrá una aceleración de los pagos inmediatos entre los mercados internacionales, en divisas cruzadas y pagos B2B, en los próximos 5 años.
- Delitos financieros
De acuerdo con el informe, los riesgos relativos a la seguridad, compliance y la privacidad de los datos, fueron la principal preocupación para bancos, fintech y administradores de activos a la hora de implementar una estrategia tecnológica completamente integrada.
Diego Maffeo, socio de PwC Argentina (previamente CEO de Prisma Medios de Pago), comentó: “Nuestro país no es ajeno a este proceso de transformación. En los últimos años ocurrieron eventos que transformaron significativamente este sector, como las regulaciones sobre los agregadores de pago; la implementación de la adquirencia multimarca permitiendo una mayor competencia y la incorporación de nuevos jugadores en el mercado; la explosión de aceptación de pagos con QR promoviendo la incorporación de muchísimos comercios pequeños y medianos hacia todo el territorio nacional; y el lanzamiento de Transferencias 3.0 promoviendo los pagos inmediatos y la interoperabilidad del sistema bancario y digital; entre otras. Todos estos cambios fueron, además, acelerados por el efecto de la pandemia de COVID-19, llevando a que el tema “medios de pago” se convierta cada vez más en un factor esencial a tener en cuenta en la estrategia de todas las empresas.”