Reemplaza a otro Timothy, Adams, en un cargo técnico. Sus nexos con Henry Paulson (titular de la cartera y hombre de Goldman Sachs) le aseguran apoyo incondicional entre medios conservadores latinoamericanos. Adams dimitió “para estar con la familia”, o sea lo defenestraron por una gestión insatisfactoria.
Con cierta fama de solapado, Ryan deberá lidiar con la negativa china y japonesa a dejar subir sus monedas (el propio Paulson no lo ha conseguido). Llega justo luego de que se desplomaran las principales bolsas mundiales, afectadas por sobrepreciación e inquietas por el horizonte recesivo que surge en la economía estadounidense, ya castigada por imparables déficit en comercio y pagos externos, que su jefe no atina a manejar.
El nuevo funcionario era vicepresidente de directorio en JP Morgan Chase. En otros tiempos, trabajó para Ronald Reagan y George W.H.Bush. Carece de experiencia en América latina, Asia oriental y meridional.
Reemplaza a otro Timothy, Adams, en un cargo técnico. Sus nexos con Henry Paulson (titular de la cartera y hombre de Goldman Sachs) le aseguran apoyo incondicional entre medios conservadores latinoamericanos. Adams dimitió “para estar con la familia”, o sea lo defenestraron por una gestión insatisfactoria.
Con cierta fama de solapado, Ryan deberá lidiar con la negativa china y japonesa a dejar subir sus monedas (el propio Paulson no lo ha conseguido). Llega justo luego de que se desplomaran las principales bolsas mundiales, afectadas por sobrepreciación e inquietas por el horizonte recesivo que surge en la economía estadounidense, ya castigada por imparables déficit en comercio y pagos externos, que su jefe no atina a manejar.
El nuevo funcionario era vicepresidente de directorio en JP Morgan Chase. En otros tiempos, trabajó para Ronald Reagan y George W.H.Bush. Carece de experiencia en América latina, Asia oriental y meridional.