El índice Reuters/Jefferies CRB de diecinueve productos primarios (“commodities” carece de sentido en castellano) avanzó en septiembre 8,7%. Es el margen más pronunciado desde julio de 1975. El trigo marca máximo nominal absoluto, mientras el maìz y el poroto de soya orillan sus propios récords.
A picos de US$ 83,60 durante la última semana del mes, los crudos Brent (Londres) también registraban valores nominales sin precedentes. Si, como suponen muchos analistas y operadores, la Reserva Federal vuelve a rebajar tipos referenciales en octubre, los futuros del euro probablemente pasen del actual US$ 1,47 (treinta días) a 1,50.
En otras palabras, a los exportadores de alimentos e insumos primarios les resultará cada dìa màs caro cambiar sus dólares por euros o por activosa de refugio. Así lo confirma una onza de oro que cerró septiembre en US$ 750,50 al contado, valor nominal inédito desde principios de febrero de 1980.
Aparte del euro, el dólar ha caído a pisos récords ante una canasta ponderada de seis divisas. Vale decir, euro, yen, libra, franco suizo, rublo y dólar canadiense. Hasta ahora, empero, no hay señales de la inflación lisa y llana que obsede a la Reserva Federal, el Banco central europeo, el banco de Inglaterra y una horda de analistas financieros. Entretanto, surge otro síntoma de grietas en el propio ciclo de negocios: las grandes bolsas no son opcionales, salvo cuando reflejan economías menos afectadas por las crisis occidentales (Japón, Brasil, China, Rusia, India.
El índice Reuters/Jefferies CRB de diecinueve productos primarios (“commodities” carece de sentido en castellano) avanzó en septiembre 8,7%. Es el margen más pronunciado desde julio de 1975. El trigo marca máximo nominal absoluto, mientras el maìz y el poroto de soya orillan sus propios récords.
A picos de US$ 83,60 durante la última semana del mes, los crudos Brent (Londres) también registraban valores nominales sin precedentes. Si, como suponen muchos analistas y operadores, la Reserva Federal vuelve a rebajar tipos referenciales en octubre, los futuros del euro probablemente pasen del actual US$ 1,47 (treinta días) a 1,50.
En otras palabras, a los exportadores de alimentos e insumos primarios les resultará cada dìa màs caro cambiar sus dólares por euros o por activosa de refugio. Así lo confirma una onza de oro que cerró septiembre en US$ 750,50 al contado, valor nominal inédito desde principios de febrero de 1980.
Aparte del euro, el dólar ha caído a pisos récords ante una canasta ponderada de seis divisas. Vale decir, euro, yen, libra, franco suizo, rublo y dólar canadiense. Hasta ahora, empero, no hay señales de la inflación lisa y llana que obsede a la Reserva Federal, el Banco central europeo, el banco de Inglaterra y una horda de analistas financieros. Entretanto, surge otro síntoma de grietas en el propio ciclo de negocios: las grandes bolsas no son opcionales, salvo cuando reflejan economías menos afectadas por las crisis occidentales (Japón, Brasil, China, Rusia, India.