Más de un tercio de los fondos de cobertura tradicionales encuestados están invirtiendo en activos digitales, lo cual representa casi el doble que hace un año.
A pesar de la importante volatilidad del sector, muchos fondos de cobertura tradicionales comenzaron a invertir en criptomonedas y se están creando más fondos especializados a medida que esta clase de activos digitales ganan aceptación. Estas son las conclusiones del 4° Informe Anual de Fondos de Cobertura de Criptomonedas 2022, realizado por PwC en conjunto con la Asociación de Gestión de Inversiones Alternativas (AIMA, por sus siglas en inglés) y CoinShares (a través de la adquisición de Elwood Asset Management, ex negocio de índices ETF de Elwood Technologies).
Según el informe, el 38 % de los fondos de cobertura tradicionales encuestados invierten actualmente en activos digitales, respecto del 21 % registrado hace un año. Mientras tanto, se estima que la cantidad de fondos de cobertura especializados en criptomonedas supera ya los 300 en todo el mundo, con el ritmo de creación de nuevos fondos acelerándose en los últimos dos años. Además, el total de los activos administrados (AuM, por sus siglas en inglés) de los fondos de cobertura de criptomonedas encuestados alcanzaron los US$ 4.100 millones en 2021, un 8 % más que en el año anterior.
El informe encontró que la mayoría de los fondos de cobertura tradicionales que comienzan a operar con activos digitales están todavía dando sus primeros pasos: el 57% tiene menos del 1% del total de sus AuM en activos digitales. No obstante, para el 20% de dichos fondos, los activos digitales representan entre el 5% y el 50% de sus AuM. Asimismo, dos tercios de los fondos (67%) que invierten actualmente en activos digitales tienen la intención de inyectar más capital en esta clase de activos para fines de 2022.
Hallazgos sobre los fondos de cobertura
Los AuM promedio se duplicaron hasta llegar a los US$ 58,6 millones respecto de los US$ 23,4 millones del año anterior, mientras que la mediana de los AuM casi se triplicó y pasó de US$ 8,5 millones a US$ 24,5 millones. De 2020 a 2021, el porcentaje de fondos de cobertura de criptomonedas con AuM que exceden los us$20 millones aumentó del 46% al 59%.
“El reciente colapso de Terra demostró los potenciales riesgos de los activos digitales. La volatilidad seguirá estando presente, pero el mercado está madurando y comienzan a surgir no solo muchos más fondos de cobertura centrados en las criptomonedas y con mayores AuM, sino también más fondos tradicionales que se aventuran en este nuevo espacio” comenta John Garvey, líder de Global Financial Services en PwC.
“El mercado viene demostrando un interés en el sector que va más allá de la coyuntura actual. Evidencia además un reacomodo de los participantes del mundo cripto incrementando la presencia de los actores tradicionales quienes se vienen preparando operativamente desde hace algún tiempo para poder actuar en las oportunidades que se presenten en el corto plazo”, amplía Roberto Sánchez Vilarino socio de PwC Argentina.
En cuanto a rendimientos de los fondos de cobertura cripto, se desaceleró levemente, pero continúa logrando solidez y un fuerte crecimiento a pesar de la volatilidad del sector. Según el informe, la mediana de los fondos de cobertura de criptomonedas obtuvo un rendimiento del 63% en 2021 – un alejamiento considerable del 127% alcanzado en 2020. Entre las estrategias de negociación ganadoras (sobre la base de la mediana de rentabilidad) lideraron la discrecional a largo/corto plazo (+199%), seguida por la discrecional a largo plazo (+176%), cuantitativa a largo plazo (+109%), cuantitativa a largo/corto plazo (+66%) y las neutrales frente al mercado (+26%).
La mayoría de los fondos de cobertura de criptomonedas operaron con Bitcoins ‘BTC’ (86%), seguidos por Ethereum ‘ETH’ (81%), Solana ‘SOL’ (56%), Polkadot ‘DOT’ (53%), Terra ‘LUNA’ (49%) y Avalanche ‘AVAX’ (47%). Estos fondos también se dedican a hacer staking (bloquear sus activos por un período de tiempo a fin de recibir una recompensa) (46%), a otorgar préstamos (44%) y a obtener préstamos (49%). La proporción de fondos de cobertura de criptomonedas que negocian con derivados también ha aumentado considerablemente, del 56% al 69%.
“Estas cifras representan un dato importante para entender la rápida adopción que los fondos de cobertura están haciendo sobre este mercado: ampliando sus opciones más allá de las “tradicionales” y extendiendo su oferta de servicios” comenta Roberto Sánchez Vilarino.
Adopción cripto: principales retos
La incertidumbre en temas regulatorios es el principal problema para los fondos de cobertura, tanto si invierten actualmente en activos digitales como si no lo hacen. El 89% de los administradores de fondos de inversión que invierten actualmente en activos digitales citaron la falta de claridad del régimen normativo y fiscal como el principal reto, y el 83% que no invierte actualmente en criptomonedas señaló la incertidumbre en cuestiones normativas como el principal obstáculo.
Los administradores de los fondos tradicionales de cobertura señalan varias áreas de infraestructura de mercado que necesitan mejorar para la adopción de activos digitales, encabezadas por las de auditoría y contabilidad (94%), gestión de riesgos y cumplimiento (93%), la capacidad de utilizar activos digitales como garantía (93%) y la administración de fondos (89%).
Acerca del Informe
Los datos incluidos en la 4ª edición anual del informe proceden de una investigación realizada en el primer trimestre de 2022 sobre una muestra de 77 administradores de fondos de cobertura de criptomonedas. El informe se centra específicamente en los fondos de cobertura de criptomonedas y excluye los datos de los fondos de índice/seguimiento/pasivos de criptomonedas al igual que los fondos de capital de riesgo en criptomonedas. Hemos trabajado con Elwood Asset Management (ahora parte de CoinShares) para obtener respuestas a la encuesta de administradores de fondos de cobertura de criptomonedas. La Asociación de Gestión de Inversiones Alternativas (AIMA) colaboró para proporcionar datos de los fondos de cobertura no especializados en criptomonedas (identificados como fondos de cobertura “tradicionales”).