<p>La inestabilidad política en Francia y Holanda están poniendo cada vez más nerviosos a los inversores. Y con razón, porque las angustias europeas están comenzando a cruzar el Atlántico. <br />
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Varias firmas norteamericanas que dieron a conocer el lunes sus resultados trimestrales citaron específicamente la debilidad europea como un problema grande. <br />
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Kellogg redujo su proyección de ganancia y estimación de ventas para 2012. Su CEO, John Bryant, dijo en un comunicado que la compañía afronta importantes desafíos en Europa. <br />
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Wolverine World Wide, que vende calzados de marcas Hush Puppies y Merrell, dijo que su informe de ganancias y su expectativa de ventas para el año en curso se ve empañado por la incertidumbre macroeconómica y financiera en Europa. Agregó que el continente está con clima de recesión. <br />
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Las multinacionales norteamericanas con gran presencia en Europa están muy preocupadas. Por un lado porque los consumidores europeos van a recortar sus gastos. Pero además les preocupan sus empresas clientes, que también podrían verse a retirar órdenes si los bancos no les prestan.</p>
Los dramas de Europa afectan a Estados Unidos
Hablar de la crisis de deuda europea como algo que afecta exclusivamente al grupo de los PIIGS (Portugal, Irlanda, Italia, Grecia, España) ya no parece adecuado. Los problemas del continente van mucho más allá de las economías de esos países.
