Impacto del caso BBVA

La cuestión de las cuentas extraterritoriales y su uso encubierto está teniendo efectos ya fuera de Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA).

Acaban de renunciar el vicepresidente de Telefónica de España –Pedro Luis Uriarte, ex vice de BBVA-, el vice de Repsol-YPF –Emilio Ybarra, también ex BBVA- y José Domingo Ampuero (vive de Iberdrola).

El BBVA es accionista en esas firmas y varias más y el asunto en trámite involucra a dieciséis ex ejecutivos de la entidad.

Estas dimisiones se vinculan con las investigaciones administrativas y legislativas sobre un fondo de US$ 215 millones, originado en utilidades de cuentas offshore, presumiblemente usadas para financiar a políticos latinoamericanos. Entre ellos, el hoy (12 de abril) depuesto Hugo Chávez.

Estrictamente, son operaciones relativas a la fusión de BBV con Argentaria y, en ciertos casos, a la de Banco Vizcaya con Banco Bilbao. Según medios españoles, unos US$ 18 millones de esos activos se destinaron a “retribuir” secretamente a ejecutivos del BBV tras la fusión con Argentaria.

En otro plano, ayer (11 de abril) el gobierno chileno desmintió que la campaña presidencial de Ricardo Lagos hubiese recibido aportes del entonces BBV. Lo mismo ha dicho la actual oposición.

Acaban de renunciar el vicepresidente de Telefónica de España –Pedro Luis Uriarte, ex vice de BBVA-, el vice de Repsol-YPF –Emilio Ybarra, también ex BBVA- y José Domingo Ampuero (vive de Iberdrola).

El BBVA es accionista en esas firmas y varias más y el asunto en trámite involucra a dieciséis ex ejecutivos de la entidad.

Estas dimisiones se vinculan con las investigaciones administrativas y legislativas sobre un fondo de US$ 215 millones, originado en utilidades de cuentas offshore, presumiblemente usadas para financiar a políticos latinoamericanos. Entre ellos, el hoy (12 de abril) depuesto Hugo Chávez.

Estrictamente, son operaciones relativas a la fusión de BBV con Argentaria y, en ciertos casos, a la de Banco Vizcaya con Banco Bilbao. Según medios españoles, unos US$ 18 millones de esos activos se destinaron a “retribuir” secretamente a ejecutivos del BBV tras la fusión con Argentaria.

En otro plano, ayer (11 de abril) el gobierno chileno desmintió que la campaña presidencial de Ricardo Lagos hubiese recibido aportes del entonces BBV. Lo mismo ha dicho la actual oposición.

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