En este contexto cambiario tan volátil, Wall Street seguía vacilando. El Dow-Jones industrial llegó a pasar los 10.000 puntos, pero no pudo sostenerse ahí. Otros indicadores neoyorquinos llegaron a perder hasta 1%, con una reacción parcial al saberse que el SRF no modificaba tipos referenciales.
Aun sin mantener el pico de US$ 1,2273 al contado, el euro se cotizaba a más de 1,24 para enero. Al cierre londinense, la moneda común avanzaba casi 24% en el año y 43% sobre el mínimo absoluto (US$ 0,858, 26 de febrero de 2002).
Los operadores en Fráncfort, Zürich, Nueva York y Tokio insisten en que el Sistema de Reserva Federal debiera reconocer los riesgos sistémicos involucrados en un dólar tan endeble. Pero, tras confirmar las tasas referenciales en su última reunión del año (ayer), el comité de mercado abierto reiteró el compromiso explícito de mantener el “call” mayorista y el redescuento federal al exiguo nivel actual. Obviamente, la prematura campaña reelectoral pesa (Alan Greenspan y nueve de los trece directores son republicanos).
Sea como fuere, la consigna general es seguir comprando posiciones cortas y largas en euros. También en francos suizos y en libras. Esta moneda marcaba el 9/12 en Londres US$ 1,1742, máximo en once años. El miércoles, el Banco del Japón (central) aumentó apreciablemente la compra de dólares e hizo subir esta moneda de ¥ 107,20 a 108,40. Con eso frenó la baja en el resto del mundo.
En este contexto cambiario tan volátil, Wall Street seguía vacilando. El Dow-Jones industrial llegó a pasar los 10.000 puntos, pero no pudo sostenerse ahí. Otros indicadores neoyorquinos llegaron a perder hasta 1%, con una reacción parcial al saberse que el SRF no modificaba tipos referenciales.
Aun sin mantener el pico de US$ 1,2273 al contado, el euro se cotizaba a más de 1,24 para enero. Al cierre londinense, la moneda común avanzaba casi 24% en el año y 43% sobre el mínimo absoluto (US$ 0,858, 26 de febrero de 2002).
Los operadores en Fráncfort, Zürich, Nueva York y Tokio insisten en que el Sistema de Reserva Federal debiera reconocer los riesgos sistémicos involucrados en un dólar tan endeble. Pero, tras confirmar las tasas referenciales en su última reunión del año (ayer), el comité de mercado abierto reiteró el compromiso explícito de mantener el “call” mayorista y el redescuento federal al exiguo nivel actual. Obviamente, la prematura campaña reelectoral pesa (Alan Greenspan y nueve de los trece directores son republicanos).
Sea como fuere, la consigna general es seguir comprando posiciones cortas y largas en euros. También en francos suizos y en libras. Esta moneda marcaba el 9/12 en Londres US$ 1,1742, máximo en once años. El miércoles, el Banco del Japón (central) aumentó apreciablemente la compra de dólares e hizo subir esta moneda de ¥ 107,20 a 108,40. Con eso frenó la baja en el resto del mundo.