La libra esterlina perdió 10% de su valor como resultado del referéndum con el que los británicos sorprendieron al mundo con su decisión de separarse de la Unión Europea. Desde entonces la incertidumbre sobre su futuro económico tuvo a la libra esterlina a los tumbos.
Aunque todavía se mantiene por debajo de los niveles anteriores al referéndum, desde comienzos de este año la libra esterlina aumentó 6% en su valor frente al dólar. Este fortalecimiento tuvo su origen en las expectativas de que el Banco de Inglaterra suba las tasas de interés. Otra de las razones es que hubo un entendimiento con la Unión Europea sobre un período de transición de 21 meses antes de que Gran Bretaña salga del bloque.