El petróleo llegó ayer al precio más alto de los últimos 10 años, superando el nivel que se alcanzó durante la Guerra del Golfo, en 1991. Tras llegar a un máximo de 34,20 dólares por barril durante la rueda, el crudo cerró a 34,14, un 6% por encima del día anterior y más de un 8% respecto del cierre del viernes. Los analistas explicaron que la suba de ayer se debió a la división entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) sobre la política de producción que deben aplicar a partir del 1º de abril. Arabia Saudita y Venezuela, por un lado, pretenden un aumento de la producción para remediar la escasa oferta que registra el mercado. Por su parte, Irán, Argelia y Libia no consideran necesario el incremento de cuotas y se inclinan por prolongar hasta el tercer trimestre los actuales niveles de producción. Mientras tanto, en la Argentina las petroleras no se animaron ayer a asegurar que no habrá nuevos aumentos en los precios de sus combustibles. El defensor del pueblo, Eduardo Mondino, prometió ayer a diputados, productores rurales y transportistas investigar a las compañías, a las que éstos acusaron de evasión impositiva y cartelización en la fijación de precios.
(La Nación, Ambito Financiero)
El petróleo llegó ayer al precio más alto de los últimos 10 años, superando el nivel que se alcanzó durante la Guerra del Golfo, en 1991. Tras llegar a un máximo de 34,20 dólares por barril durante la rueda, el crudo cerró a 34,14, un 6% por encima del día anterior y más de un 8% respecto del cierre del viernes. Los analistas explicaron que la suba de ayer se debió a la división entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) sobre la política de producción que deben aplicar a partir del 1º de abril. Arabia Saudita y Venezuela, por un lado, pretenden un aumento de la producción para remediar la escasa oferta que registra el mercado. Por su parte, Irán, Argelia y Libia no consideran necesario el incremento de cuotas y se inclinan por prolongar hasta el tercer trimestre los actuales niveles de producción. Mientras tanto, en la Argentina las petroleras no se animaron ayer a asegurar que no habrá nuevos aumentos en los precios de sus combustibles. El defensor del pueblo, Eduardo Mondino, prometió ayer a diputados, productores rurales y transportistas investigar a las compañías, a las que éstos acusaron de evasión impositiva y cartelización en la fijación de precios.
(La Nación, Ambito Financiero)