<p>Para CCM, las cosas empeoran y va camino del infierno custodiado por el perro de tres cabezas epónimo de su fondo. Esta semana, Chrysler declaró que sus ventas norteamericanas (Estados Unidos-Canadá) cayeron en agosto 32% respecto de doce meses antes. Honda (+2%) y Nissan (+16%) le han arrebatado el cuarto y quinto puestos locales en ventas (el tercero ya lo tenía Toyota).</p>
<p>Al mismo tiempo, GMAC –donde Cerberus tiene 51%- padece sangrías en un negocio que suponía inmune a los altibajos: el crédito hipotecario. La división Residential Capital despedirá cinco mil personas (60% de la fuerza laboral) y cerradas sus doscientas sucursales minoristas.</p>
<p>Es un resonante fracaso doble para Feinberg, que fundó CCM en 1992 con apenas diez millones y fue saludado en 2006/7 –no en este sitio- como salvador de Chrysler. Por entonces, sólo algunos economistas serios no creían en los fondos de capital extrabursátil ni en su poder, suficiente para comprarse (sin poner dinero propio) íconos como esa compañía. A menos de dos años de esa moda, las cosas no parecen ir bien y no sólo para el Cancerbero.</p>
<p>En realidad, Chrysler no termina de asimilar la separación de Daimler, tras diez años de pérdidas para los alemanes. Ahora, la empresa sigue lidiando con una restructuración que ha costado ya 28.000 despidos y US$ 500 millones en venta de activos. Su neta es financiar una inversión de US$ 7.400 millones vía deuda nueva de la firma (no de CCM). Pero Feinberg tomó a Roberto Nardelli (ex Home Depot), un hombre de antecedentes poco gratos. No lo ideal para regresar en 2010 al mercado de capitales.</p>
<p>Desde que Cerberus la adquirió, Chrysler viene achicando costos. El proceso llevó ya 28.000 despidos y venta de activos por US$ 500 millones. Días atrás, se contemplaba subastar la división que fabrica el Dodge Viper, el deportivo estelar de la marca. Según las escasas cifras que difunde CCM, a junio Chrysler tenía sólo US$ 11.700 millones en caja y el primer semestre le deparaba utilidades por apenas US$ 1.100 millones. Un perfil poco saludable.</p>
<p>Entretanto, lo de GMAC subraya que CCM también debe afrontar la crisis inmobiliaria. Residential Capital, una de las mayores hipotecarias privadas, se hizo cargo de operaciones tan riesgosas que no pudieron recolocarse en Fannie Mae ni Freddie Mac. Ambos gigantes se debaten en sus propias dificultades y esas acreencias entran en cese de pagos por la caída de precios inmobiliarios.</p>
<p>Hacia mediados de año, RC y sus bonistas reestructuraron US$ 14.000 millones en títulos para aliviar el peso de deudas. Pero, según varios analistas, tal vez no se suficiente para salvar a la firma de crecientes moras hipotecarias.</p>
En Chrysler y GMAC, las cosas marchan mal para el Cancerbero
Stephen Feinberg, fuerte especulador, esperaba hacer una fortuna vampirizando automotrices. En vez, está perdiendo una y su fondo, Cerberus Capital Management, trata de salvar la plata en Chrysler y GMAC, la financiera de General Motors.