El índice que registra los movimientos de los vinos más activos de Borgoña, el Liv-Ex Burgundy 150, saltó 35% el año pasado, con récord en noviembre antes de descender ligeramente en diciembre. Comparativamente, el oro subió 5%.
Lo que está subiendo llamativamente los precios de lsos vinos franceses de la borgoña es la gran demanda que se mantiene ya desde hace algunos años. Contribuye también el mal clima que viene sufriendo la región, lo que se traduce en oferta limitada.
Creció también el interés por parte de compradores asiáticos, especialmente chinos que antes se habían retirado del mercado de los vinos finos obligados por las leyes de austeridad y anti corrupción de Beijing.
El interés en los vinos de esa región de Francia ha crecido tanto que hasta lo reflejan las grandes casas de substas. Ültimamente Sotheby’s remató dos botellas de Romanée Conti, una en US$ 558.000 y la otra en US$ 496.000.
El furor es tal que el Ãndice Burgundy 150 creció casi 170% desde 2010.