Según un informe publicado ayer por Wood Mackenzie, la consultora especializada en temas energéticos, el equivalente a un billón y medio de dólares en posibles inversiones en todo el mundo, peligran con los actuales precios del petróleo en US$ 50 el barril y es muy probable que no se lleguen a realizar.
Los operadores de la industria calculan que los nuevos proyectos van a ir declinando entre 20 y 30% como consecuencia de la caída de los precios. El informe estima que ya se han reducido unos US$ 220.000 millones. Esa reducción en el gasto significa que el desastre podría asemejarse al de mediados de la década del 80.
Este año, dice el informe Wood Mac, se aprobarán una media docena de nuevos proyectos y otros 10 u 11 en 2016. Esto se compara con un promedio anual entre 50 y 60.
Los grandes grupos de gas y petróleo buscan reducir costos luego de años de precios y salarios por las nubes. Según el estudio, haría falta un largo período de precios bajos para provocar cambios profundos en los costos de la industria petrolera. A pesar de las comparaciones con los años 80, Wood Mac cree que es poco probable que se produzca un cambio estructural.