Las últimas, duras declaraciones de George W.Bush y Donald Rumsfeld, secretario de Defensa, combinadas con el “alerta naranja” sobre terrorismo en EE.UU., hacen sospechar a los mercados que “la guerra es inminente. Con reservas estratégicas bajas, la demanda desborda la oferta”. Así señalaban dos o tres operadores en la plaza petrolera a término de Nueva York, donde los crudos llegan al máximo en dos años. También se observaban alzas oportunistas en combustibles de uso intensivo en el invierno boreal.
En este clima, los crudos tejanos a entregar en marzo aumentaron ayer 2,5% y quedan en US$ 35,20 el barril. En la semana, el alza acumula 4,5%. En Londres, los crudos tipo Brent, también a marzo, subían 2,6% a US$ 32,25 el barril.
Curiosamente, la novedad que más llamaba la atención en Wall Street –donde se negociaba poco y los indicadores descendían moderadamente- fue una sorpresa. Inclusive contra presunciones de Washington, el desempleo urbano cedió de 6 a 5,7% en enero. Al parecer, en el sector privado hay más tomas que despidos de personal, algo que no ocurría desde octubre.
“Las estadísticas son alentadoras –opina Alfred Broaddus, presidente de la Reserva Federal de Richmond, Virginia-, aunque todavía no alcanzan para un sólido repunte en los negocios”. Otros observadores estiman que el desempleo debiera replegarse a 5% para hablar de reactivación, pues sigue en los máximos de siete años. De paso, ninguno de los 65 analistas consultados mensualmente por la agencia Bloomberg espera una cifra inferior a 5,9% y, en promedio, pronosticaron que se repetiría el 6% de diciembre.
Las últimas, duras declaraciones de George W.Bush y Donald Rumsfeld, secretario de Defensa, combinadas con el “alerta naranja” sobre terrorismo en EE.UU., hacen sospechar a los mercados que “la guerra es inminente. Con reservas estratégicas bajas, la demanda desborda la oferta”. Así señalaban dos o tres operadores en la plaza petrolera a término de Nueva York, donde los crudos llegan al máximo en dos años. También se observaban alzas oportunistas en combustibles de uso intensivo en el invierno boreal.
En este clima, los crudos tejanos a entregar en marzo aumentaron ayer 2,5% y quedan en US$ 35,20 el barril. En la semana, el alza acumula 4,5%. En Londres, los crudos tipo Brent, también a marzo, subían 2,6% a US$ 32,25 el barril.
Curiosamente, la novedad que más llamaba la atención en Wall Street –donde se negociaba poco y los indicadores descendían moderadamente- fue una sorpresa. Inclusive contra presunciones de Washington, el desempleo urbano cedió de 6 a 5,7% en enero. Al parecer, en el sector privado hay más tomas que despidos de personal, algo que no ocurría desde octubre.
“Las estadísticas son alentadoras –opina Alfred Broaddus, presidente de la Reserva Federal de Richmond, Virginia-, aunque todavía no alcanzan para un sólido repunte en los negocios”. Otros observadores estiman que el desempleo debiera replegarse a 5% para hablar de reactivación, pues sigue en los máximos de siete años. De paso, ninguno de los 65 analistas consultados mensualmente por la agencia Bloomberg espera una cifra inferior a 5,9% y, en promedio, pronosticaron que se repetiría el 6% de diciembre.