(EFE).- El precio de los futuros de crudo y de nafta comenzaron la semana n baja en el mercado de Nueva York, debido a las tomas de ganancias de los operadores tras las últimas subas y mientras esperan más datos sobre reservas almacenadas.
El precio de los contratos para entrega en junio del Petróleo Intermedio de Texas, que es el de referencia en Estados Unidos, bajó US$ 0,61 y quedó en 27,75 por barril.
Los contratos de nafta para junio también registraron un descenso y quedaron a US$ 1,06 por galón (3,7 litros), aunque al comienzo de la sesión llegaron hasta los 1,09.
Los analistas relacionaron los descensos de hoy con tomas de ganancias y con las expectativas de que las reservas de nafta podrían haber aumentado en la pasada semana, a medida que las refinerías incrementan su actividad después de concluir las labores de mantenimiento previstas para finales del invierno en Estados Unidos.
Los incrementos en el precio de los futuros de nafta, debido al bajo nivel de las reservas almacenadas, arrastran al alza a los precios del crudo desde hace semanas, y han causado que el precio medio de venta en estaciones de servicio se coloque en US$ 1,68 por galón, un centavo por encima del récord logrado en el mes de junio del pasado año, según la Asociación Americana del Automóvil (AAA).
Esta asociación, que realiza sondeos periódicos tomando como base a unas 60.000 estaciones de servicio estadounidenses, informó que el precio medio actual supera en US$ 0,20 al de hace un mes y que los valores más altos se registran en California y en Estados del centro del país, debido a normas más estrictas contra la contaminación.
Por otra parte, el Departamento de Energía señaló que el precio de la nafta puede situarse en el verano entre US$ 1,50 y 1,75 por galón.
Ari Fleisher, portavoz de La Casa Blanca, señaló que el presidente “está muy preocupado” por el aumento de precios y que la administración busca poner en marcha soluciones que cubran un largo plazo en lugar de medidas concretas, como por ejemplo, rebajar el impuesto asociado el precio de la nafta, que es de unos US$ 0,18 por galón.
A pesar de los aumentos en el precio de la nafta, el consumidor estadounidense paga menos que otros muchos consumidores en Europa y Asia, donde el precio del galón se sitúa entre US$ 3 y 4 por galón.
(EFE).- El precio de los futuros de crudo y de nafta comenzaron la semana n baja en el mercado de Nueva York, debido a las tomas de ganancias de los operadores tras las últimas subas y mientras esperan más datos sobre reservas almacenadas.
El precio de los contratos para entrega en junio del Petróleo Intermedio de Texas, que es el de referencia en Estados Unidos, bajó US$ 0,61 y quedó en 27,75 por barril.
Los contratos de nafta para junio también registraron un descenso y quedaron a US$ 1,06 por galón (3,7 litros), aunque al comienzo de la sesión llegaron hasta los 1,09.
Los analistas relacionaron los descensos de hoy con tomas de ganancias y con las expectativas de que las reservas de nafta podrían haber aumentado en la pasada semana, a medida que las refinerías incrementan su actividad después de concluir las labores de mantenimiento previstas para finales del invierno en Estados Unidos.
Los incrementos en el precio de los futuros de nafta, debido al bajo nivel de las reservas almacenadas, arrastran al alza a los precios del crudo desde hace semanas, y han causado que el precio medio de venta en estaciones de servicio se coloque en US$ 1,68 por galón, un centavo por encima del récord logrado en el mes de junio del pasado año, según la Asociación Americana del Automóvil (AAA).
Esta asociación, que realiza sondeos periódicos tomando como base a unas 60.000 estaciones de servicio estadounidenses, informó que el precio medio actual supera en US$ 0,20 al de hace un mes y que los valores más altos se registran en California y en Estados del centro del país, debido a normas más estrictas contra la contaminación.
Por otra parte, el Departamento de Energía señaló que el precio de la nafta puede situarse en el verano entre US$ 1,50 y 1,75 por galón.
Ari Fleisher, portavoz de La Casa Blanca, señaló que el presidente “está muy preocupado” por el aumento de precios y que la administración busca poner en marcha soluciones que cubran un largo plazo en lugar de medidas concretas, como por ejemplo, rebajar el impuesto asociado el precio de la nafta, que es de unos US$ 0,18 por galón.
A pesar de los aumentos en el precio de la nafta, el consumidor estadounidense paga menos que otros muchos consumidores en Europa y Asia, donde el precio del galón se sitúa entre US$ 3 y 4 por galón.